La talla de San Bernabé, bajo el arco de su nombre.

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La talla de San Bernabé, bajo el arco de su nombre. JUAN MARÍN

Ya no hay franceses a la vista

Las fiestas bernabeas concluyen con el traslado del patrón, pasacalles, animación callejera y una comida renacentista

P. G.

Lunes, 12 de junio 2023, 21:30

El último día de fiesta deja siempre en el aire aromas de pereza y de melancolía. La rutina va reclamando poco a poco su espacio, ... como una pegajosa mancha de aceite que se expande irremediablemente, y, aunque el programa está todavía lleno de actos y de sonrisas, el ambiente va perdiendo electricidad y expectativas.

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La imagen de San Bernabé, triunfante estos días en El Revellín, se ha retirado este lunes a su aposento habitual, en la sede de la Cocina Económica.

Tras la solemne entrada de Carlos I de Castilla, con sus heráldicas flores de lis, las tropas defensoras –Guardias de Santiago, Héroes del Revellín y Voluntarios de Logroño– celebraron la victoria sobre los franceses con un pasacalles y una comida.

Por la tarde, animaciones, teatrillos y músicas ambulantes, y mucha gente aún de paseo o en las terrazas, pero el martes lectivo –pocas bromas con él– asomaba ya sus garras.

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