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El nuevo Gobierno, en plenas funciones tras prometer el cargo ante el Rey

Fue Sofía Puente, directora general de Seguridad Jurídica y Fé Pública, y hermana del ya ministro Óscar Puente, quien ejerció como notaria mayor del reino hasta que Félix Bolaños prometió su cargo de ministro de Justicia, que sumó al de Presidencia y Relaciones con las Cortes, y se situó entonces a la izquierda del Rey, como testigo de excepción del juramento (aunque todos tomaron posesión del cargo mediante la fórmula de promesa) del flamante gabinete de Pedro Sánchez.

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Tras la promesa de Bolaños les llegó el turno a las cuatro vicepresidentas, Nadia Calviño, Yolanda Díaz, Teresa Ribera y María Jesús Montero, y al resto de ministros. Nueve se estrenaban en este acto: Jordi Hereu (Industria), Elma Saiz (Seguridad Social y Políticas Migratorias), Ángel Víctor Torres (Política Territorial y Memoria), Ana Redondo (Igualdad), Óscar Puente (Transportes y Movilidad Sostenible), Mónica García (Sanidad), Ernest Urtasun (Cultura), Sira Rego (Infancia y Juventud) y Pablo Bustinduy (Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030).

Todos ellos asumieron el cargo de ministros con la fórmula establecida: «Prometo por mi conciencia y honor cumplir las obligaciones del cargo de ministro (...) con lealtad al Rey y guardar y hacer guardar la Constitución como norma fundamental del Estado, así como mantener el secreto de las deliberaciones del Consejo de Ministros». Una fórmula a la que ya en la pasada legislatura la mayoría de los miembros del gabinete añadieron la coletilla de «ministras». Todos los componentes del nuevo Ejecutivo especificaron lo de «ministros y ministras» o «ministras y ministros», salvo Luis Planas, ministro de Agricultura, y Pablo Bustinduy, que utilizaron la fórmula original que figuraba en el escrito que tenían en la mesa.

El acto careció de nuevo de cualquier símbolo religioso, que es opcional desde julio de 2014, cuando, poco después de que Felipe VI fuera proclamado Rey de España, diera la opción a los altos cargos de jurar o prometer sus cargos con o sin símbolos religiosos. Fue precisamente Pedro Sánchez, en junio de 2018, tras llegar a la Moncloa tras prosperar la moción de censura contra Mariano Rajoy, el primer miembro de un Gobierno que prometió su cargo sin que estuvieran presenten un crucifijo y un ejemplar de la Biblia.

Aquel acto también supuso otra novedad, la ausencia de la consorte del Rey. Si bien doña Sofía siempre acompañó al rey Juan Carlos en los actos de juramento a miembros del Gobierno, doña Letizia nunca lo ha hecho. Quienes sí estuvieron presenten, como máximas autoridades del Estado, fueron Francina Armengol, presidenta del Congreso; Pedro Rollán, presidente del Senado; Cándido Conde-Pumpido, presidente del Tribunal Constitucional, y Vicente Guilarte, presidente del Consejo General del Poder Judicial por suplencia.