El cuerpo de la víctima del crimen de Viniegra sigue en Logroño seis meses después de su asesinato

La familia y los amigos reclaman desde Argelia los restos de Djafer. De hecho, pocos días después del crimen, la asociación Taguemount Azouz, que lleva el nombre del pueblo natal de Djafer, inició una campaña de 'crowdfunding' con el mismo propósito, que la víctima descansara en su ciudad, un municipio situado a unos 120 kilómetros de Argel en el que nació hace 45 años. El objetivo era conseguir 6.000 euros a través de la plataforma Helloasso y a los pocos días ya habían logrado 7.570.

Pese a ello, los restos siguen en la capital riojana a la espera de que el Juzgado de Instrucción número 1 de Logroño encargado del caso finalice las pesquisas y por si fuera necesario efectuar alguna otra prueba que puedan solicitar tanto la defensa como la acusación.

La familia está «destrozada», explica Ramdane Belmiloud, amigo y paisano de Bechkat, y reclama de nuevo la repatriación del cuerpo para darle sepultura en su pueblo. No entienden, detalla, por qué tiene que permanecer más tiempo en Logroño, tan lejos de su país.

En su momento, la Asociación Argelina en La Rioja transmitió por boca de su presidente, Nasreddine Benlakehal, el pesar de la familia de Djafer Bechkat por no disponer de los restos para enterrarlo en su país. «Su familia está llorando sangre porque no saben cuándo tendrán a su hijo. Nadie les dice nada», manifestó entonces.

El cadáver de Djafer fue localizado en la tarde noche del pasado 11 de agosto en la torca Hoyo Mingo, a unos 50 metros de profundidad. Un agente forestal de la zona dio la voz de alarma. Hacia las 14 horas de aquel tórrido día, vio circular una furgoneta y a dos individuos arrojar después un cuerpo a la sima. Los agentes del Grupo de Rescate de Intervención en Montaña de la Guardia Civil en La Rioja rescataron el cuerpo horas más tarde. Sobre las 18 horas el vehículo era localizado estacionado en la avenida de la Constitución de Logroño y poco después eran detenidos dos individuos de 39 y 45 años. Uno de ellos, natural de Viniegra de Arriba, donde la familia tiene un terreno, y el otro, residente en Alberite. Precisamente este último disfrutaba de un permiso penitenciario y llevaba una pulsera de localización en el momento de su detención. Días después fue arrestada también su pareja sentimental, aunque en este caso la juez acordó su puesta en libertad con cargos.

De acuerdo con las pesquisas posteriores, llevadas a cabo en el marco de la operación bautizada como 'Sima-Titán', los detenidos habrían acabado con la vida de Beckkat, residente en Logroño y también con un amplio historial delictivo, por una deuda de 13.600 euros que tenían contraída con él. Al parecer, le habrían convencido para acudir a Viniegra de Arriba y saldar cuentas. Era el 9 de agosto.

Una vez en el municipio, le llevaron a un paraje apartado del pueblo y le golpearon con violencia en la cabeza y luego le dispararon en la nuca. Después envolvieron la cabeza de la víctima con una bolsa mediante bridas al cuello e introdujeron su cuerpo en un vehículo. Allí permaneció hasta que fue arrojado a la sima el día 11 de agosto, 48 horas después de su muerte.