Los países afectados por la tragedia de los incendios ponen el foco en los pirómanos

En Grecia investigan desde hace días el origen de los fuegos que se han cebado con la turística isla de Rodas, donde los rebrotes son constantes, y que han saltado a otras como Corfú –su situación ha mejorado mucho– y Eubea y también a la península, con incendios incluso en barrios de Atenas. Cada pocos minutos, el 112 informa de nuevas evacuaciones. Hasta 600 focos se han detectado en apenas dos semanas en el país, que lamenta la muerte de cinco personas. Las dos últimas –un ganadero que había acudido a salvar a sus animales y una mujer atrapada en su casa– perdieron la vida el miércoles en la ciudad portuaria de Volos.

La extinción de los incendios ha dejado 74 bomberos heridos en Grecia, mientras que en Italia circulan imágenes con efectivos sentados en el suelo «exhaustos» entre turno y turno. La situación es tan delicada en la isla de Sicilia –vaciada de turistas y con fuegos en Siracusa, Catania o Messina, que continúa sin luz ni agua en algunas áreas– que el alcalde de Palermo, Roberto Lagalla, estalló el jueves contra quienes hayan prendido la chispa. «Son delitos graves como los de la mafia, son crímenes de lesa humanidad», denunció. Un dron ya ha 'cazado' a uno de estos pirómanos en un campo de Curinga, en la región de Calabria, cuando encendía varios focos en la vegetación seca.

Las autoridades argelinas han declarado asimismo la guerra al fuego y a quienes están detrás de él, con la detención de 19 personas sospechosas de haber provocado las llamas que se han cobrado la vida de 40 ciudadanos, entre ellos una decena de militares. «En caso de que se establezca el carácter delictivo y subversivo, los expedientes serán remitidos a la sección de Antiterrorismo y lucha contra el crimen organizado», anunciaron fuentes judiciales. Allí, como en la vecina Túnez, los focos detectados en los últimos días se han dado por controlados. También está sofocado ya el incendio desatado en Portugal cerca de Cascais –que dejó 13 heridos, la mayoría bomberos por inhalación de humo–, mientras que en Croacia se concentraban este jueves los esfuerzos en la isla de Ciovo, frente al mar Adriático.

Pero la tragedia de los incendios no para de cruzar fronteras y en las últimas horas también luchaban contra esta lacra en Bulgaria, con un fuego forestal declarado en el límite con Grecia, y en Francia, con focos en dos regiones cercanas al aeropuerto de Niza.