Una cadena de errores humanos tendría la culpa del naufragio en la madrugada del pasado lunes del lujoso velero 'Bayesian' frente a las costas del norte de Sicilia, en el que perdieron la vida seis de sus pasajeros. El último cadáver fue hallado este viernes ... y, aunque todavía no ha trascendido su identidad, se trataría de la joven de 18 años Hannah Lynch, hija del magnate Mike Lynch, de 57, conocido como el 'Bill Gates británico' y cuyo cuerpo sin vida fue llevado el miércoles a tierra tras ser localizado por los equipos de rescate en el interior del buque. El empresario había organizado el crucero con amigos y familiares para celebrar su victoria tras una larga batalla judicial en Estados Unidos.
Publicidad
Noticias relacionadas
Fabricado en uno de los astilleros más exclusivos de Italia, con 54 metros de eslora y bandera británica, el 'Bayesian' se encuentra tras su hundimiento apoyado sobre uno de sus costados en el fondo marino a unos 50 metros de profundidad frente al puerto de Porticello, cerca de Palermo. Mientras los submarinistas de la Guardia Costera y de los Bomberos prosiguen con la búsqueda del cuerpo de la joven desaparecida, la Fiscalía de la localidad italiana de Termini Imerese, encargada de esclarecer las causas del desastre, comenzaría a tener claro que los errores cometidos por la tripulación, comenzando por el capitán, James Cutfield, tendrían la culpa última del incidente.
De 53 años y oriundo de Nueva Zelanda, Cutfield podría ser acusado de diversos delitos, entre ellos naufragio y homicidio múltiple con agravantes. Según los medios locales, se habría justificado ante los investigadores asegurando que en «pocos minutos» se desató una tromba marina en la zona donde se encontraba el 'Bayesian'. La tormenta, no obstante, no afectó a una goleta que se encontraba a poca distancia y cuyos tripulantes fueron los primeros en auxiliar a los náufragos del lujoso yate.
Para Giovanni Costantino, fundador y consejero delegado de The Italian Sea Group, la empresa propietaria del astillero Perini Navi, donde en 2008 fue construido el 'Bayesian', esta embarcación resultaba muy segura y prácticamente imposible de hundir. «Obviamente salvo que entrara agua. No hay otra explicación. Si se hubieran tomado las decisiones adecuadas para no comprometer la seguridad del barco habría habido un riesgo igual a cero», dijo al diario 'Il Corriere della Sera'. A su juicio, la tripulación del velero cometió diversos «errores» que acabaron propiciando el hundimiento, ya que uno de los portones laterales habría quedado abierto y la quilla se encontraba alzada en parte.
Tampoco se impidió que los pasajeros celebraran una fiesta poco antes de la llegada del temporal, que estaba anunciado, ni se les ubicó a todos juntos en una sala, dejando que fueran a sus camarotes. Costantino tachó de «broma» las informaciones iniciales que echaban la culpa del naufragio a la altísima longitud del mástil, que habría quedado además intacto en el incidente.
¡Oferta 136 Aniversario!
¿Ya eres suscriptor? Inicia sesión
Te puede interesar
Publicidad
Utilizamos “cookies” propias y de terceros para elaborar información estadística y mostrarle publicidad, contenidos y servicios personalizados a través del análisis de su navegación.
Si continúa navegando acepta su uso. ¿Permites el uso de tus datos privados de navegación en este sitio web?. Más información y cambio de configuración.