Venezuela tiene más que perder que ganar si rompe con España

España ocupa un lugar relevante para Venezuela en materia de exportaciones. Es su tercer cliente, con compras anuales –esencialmente, combustibles y lubricantes– valoradas en más de 672 millones de dólares (datos de 2023), por detrás de EE.UU. y China. Esta cifra descontexualizada dice poco si no se tiene en cuenta que la potencia estadounidense se convirtió por primera vez en la historia en el principal proveedor de petróleo de nuestro país el año pasado, según los datos de la Corporación de Reservas Estratégicas de Productos Petrolíferos (Cores). El resumen de las importaciones de crudo por países de 2023 reflejó que los envíos de crudo hasta España se dispararon un 31,2%, hasta alcanzar un nuevo récord de 8,71 millones de toneladas.

En lo que se refiere a las importaciones, los principales socios comerciales de la economía latinoamericana son Pekín, Washington y Brasil con España retrocediendo posiciones hasta el séptimo puesto en 2023. Venezuela sólo adquiere productos españoles por unos 156 millones de dólares —la mayoría, maquinaria y materiales químicos–.

Pese a esta caída en las relaciones comerciales en los últimos años, de la evolución de la situación diplomática entre ambos países sí estarán pendientes las 60 empresas españolas que, según datos del ICEX con datos a 29 de agosto, están establecidas en este país. Entre ellas figuran entidades del Ibex 35 como BBVA, Acciona, Mapfre, Repsol, Grupo Prisa (a través de Santillana) o Iberia operan allí.

«Las relaciones del Gobierno permiten saber que los intereses comerciales de España y el interés de nuestras empresas, que en definitiva es lo importante, están a salvo», afirmó este jueves la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero.

De acuerdo con el Registro de Inversiones Exteriores, la posición global de inversión extranjera en España el año pasado alcanzó los 28.215 millones de euros. Cuatro países concentran más del 30% de la inversión extranjera en España. Y, por supuesto, Venezuela no figura entre ellos. Estados Unidos fue el primer país emisor de estos flujos, con un 28,9% del total. Le siguió, como de costumbre, Reino Unido (13,1%), Alemania (10,6%) y Francia (9,2%).

Caracas dejó de publicar cifras de inversión en el año 2013. Las últimas estadísticas oficiales disponibles que recoge el Icex reflejan un stock de la Inversión Extranjera Directa (IED) española en Venezuela de 507 millones de euros en 2021, un 90% más que en 2020. En el Ranking de Países por Posición Inversora en el Exterior para el ejercicio 2021, no ETVE  (Entidades de Tenencia de Valores Extranjeros), Venezuela se sitúa en el 50º puesto.

Por su parte, el stock de la inversión directa de Venezuela en España fue de unos 5.000 millones de euros hasta 2020. En 2021 cayó a 1.428 millones de euros debido a que el titular de una inversión consiguió en 2021 la residencia en España y su inversión deja de tener la consideración de inversión extranjera.

La deuda de Venezuela frente al España asciende a 222 millones de euros, de los cualess 160 millones se encuentran impagados.