Baladas, Fonsi y cien por cien Bustamante

«Después de aquí iremos a Sevilla, Betanzos, Suances...» relataba al lado del foso Iranzu, una de las jóvenes del club de fans 'Universo de todo', que se desplazó a Calahorra a ver al artista cántabro. Bustamante se mostró tal cual y dejó ver hasta su sentido del humor. «Si queréis ligar al instante usar perfume Bustamenta», bromeó con el público al referirse a la colonia que lleva su nombre. Al igual que Álex Ubago, debutó con gafas de sol y 'Devuélveme la vida'. En la terraza de la torre de sonido su pareja Yana Olina cantaba cada una de las canciones. Allí se dejaba ver la influencer y coleccionista de moda Carmen Lomana, que también fue el foco de infinidad de selfis. David Bustamante, además, pasó por Calahorra con un nuevo tema recién sacado del horno. El cantante acababa de pepresentar 'Hola qué tal' y «es la primera vez que lo cantó en directo», decía. Felices se sentían entonces con la noticia las jóvenes de su club de fans, quienes evidentemente ya se conocían la letrar, a pesar de que lo había lanzado hacía sólo un día. Otro momento para el recuerdo fue el que dejó con la canción 'Por el amor de esa mujer', que dedició a su compañero en la academia de Operación Triunfo, Alex Casademunt, quien falleció en un accidente de tráfico en un accidente de tráfico. Fue Bustamente sin lugar a dudas el motor de la segunda del festival, en el que hizo que el público se entregara con sus temas más conocidos como 'Héroes' o su 'feliz con lo que tengo, feliz con lo que siento'.

El puertorriqueño Luis Fonsi llegaba después con grupo de baile inlcluido. La noche iba de trayectoria y Fonsi hizo repaso igualmente a su 'Viaje' durante los 25 años que lleva pisando escenarios. Arrancó fuerte con su 'corazón en la maleta' y quedó imágenes tiernas al proyectar un vídeo de su infancia cantando. Fonsi era una de las estrellas latinoamericanasdel festival, junto a Juanes, quien finalmente no actuó el jueves a causa de la lluvia.

La suspensión de este concierto todavía la sentía Johnny y su grupo de amigos, vecinos de Calahorra y naturales de Medellín, en Colombia, ciudad natal del artista. «Mis hermanas hasta lloraron cuando dijeron que se había suspendido el concierto. estabámos muy ilusionados de verlo aquí, porque lo íbamos a poder ver muy cerca, ya que en Colombia lo habíamos visto pero en estadios muy grandes», comenta Johnny, que llevaba una de las camisetas que habían preparado para el concierto de Juanes de este Gran Reserva, que esta noche de sábado termina con Edurne.