El avistamiento de un 'cubo' en la cara oculta de la Luna desata las especulaciones

La imagen, captada el 3 de diciembre, sería un típico paisaje lunar más bien aburrido si no fuera por una diminuta protuberancia que se aprecia en el horizonte. El hecho de que la propia Administración Nacional del Espacio de China (CNSA) se haya referido a este objeto como «misteriosa cabaña» ha desatado todo tipo de especulaciones y bromas en las redes sociales.

Lo que parece ser un objeto cúbico está a unos 80 metros del vehículo automático –en la Luna el punto del horizonte está mucho más cerca del observador que en la Tierra– que está recorriendo el cráter Von Kármán. Según el blog 'Our Space', dependiente de la CNSA, los técnicos que desde la Tierra controlan el Yutu-2 examinaban las fotografías enviadas por el aparato cuando «de repente llamó su atención un cubo entrometido en la línea del horizonte». El objeto «rompía la línea sinuosa del horizonte como una 'cabaña misteriosa'», dijeron.

Los memes no se han hecho esperar, empezando desde la propia China. Según recoge Reuters, muchos muestran al 'rover' circulando sobre el fondo del cráter hacia dos obeliscos, un monolito como el de '2001' o incluso una hoz y un martillo gigantes. «Es basura espacial dejada por Estados Unidos», dice un internauta chino en las redes sociales. «Acércate un poco más y verás que es un sitio de pruebas de ácido nucleico para Covid-19», bromea otro. «¡Es el hogar de los extraterrestres!», añade un tercero. Por supuesto, las especulaciones en este último sentido 'ufológico' se han disparado y la 'cabaña' se ha sumado a la lista de 'ruinas' selenitas ya conocidas. Por el otro extremo, los especialistas que han visto la imagen han sugerido que muy probablemente se trata de una roca desprendida del lecho lunar por el impacto de un meteorito.

Para salir de dudas y averiguar de qué se trata a ciencia cierta, los responsables de la misión han decidido orientar el vehículo hacia el objeto. El Yutu-2 recorrerá la distancia de 80 metros en dos o tres días lunares; es decir, unos tres meses terrestres.