En el día Mundial de la Diabetes Únete al reto ‘un día sin azúcar’ para evitar el riesgo de diabetes y proteger tu corazón

Quieren que cale en la sociedad la necesidad de adoptar una dieta saludable para un mejor control del nivel de glucemia y de esta patología, que afecta a 1 de cada 7 personas adultas en España. No hay excusas para no seguir el reto del cero azúcar y sí muchas razones.

Se estima que el 13,8% de la población española tiene diabetes mellitus tipo 2 (DM2), de la que solamente el 7,8% está diagnosticada. Cada año, se diagnostican 11,6 casos por cada 100.000 habitantes, lo que supone 385.000 nuevos casos al año.

Por otra parte, se trata de una enfermedad de carácter sistémico que puede acarrear múltiples complicaciones de salud y afectar a distintos órganos diana (entre ellos, corazón, riñón, ojos o cerebro), y que pone en grave riesgo la vida del paciente.

Once doctores contra el riesgo de la diabetes

Los médicos internistas, como especialistas con visión integral del paciente, desempeñan un papel clave en el manejo de esta patología y sus complicaciones. Con la propuesta de un día ‘cero azúcar’ toman la iniciativa en la labor de concienciar a la población del riesgo de la diabetes.

El doctor Ricardo Gómez Huelgas: “Proponemos celebrar un día sin azúcar como gesto de solidaridad y como llamada de atención”

Entre los doctores, el doctor Ricardo Gómez Huelgas, médico internista miembro de SEMI, afirma que “la idea es que durante 24 horas suprimamos de nuestra dieta todos los azúcares, por un lado como un gesto de solidaridad hacia los pacientes que viven con diabetes y, por otro, como llamada de atención a las autoridades para implementar medidas más intensas de promoción de la dieta saludable”.

Vivir sin azúcar es posible y evitar el riesgo de diabetes

Por su parte, el doctor Francisco Javier Carrasco, médico internista miembro de SEMI y excoordinador del Grupo de Trabajo de Diabetes, Obesidad y Nutrición de SEMI, afirma que “vivir sin azúcar es posible. La clave es que nos acostumbremos progresivamente al sabor natural de los alimentos, merece la pena”.

Nadie dice que sea fácil, cuando a diario recibimos cientos de impactos proponiendo productos procesados, con azúcares refinados y alto valor calórico. Pero hay que intentarlo, adoptando una conciencia más responsable de nuestra propia salud y trabajando la prevención todos los días.

El factor calórico de la alimentación es importante, porque el sobrepeso es uno de los factores principales que predisponen al desarrollo de la diabetes mellitus tipo 2. De hecho, el 80% de las personas con diabetes mellitus del tipo 2 tiene un peso superior al que le correspondería. Igualmente grave es que el 23% de la población española presenta obesidad, que como sabemos está relacionado con la diabetes y con la enfermedad cardiovascular.

La doctora Lola García: “Hay que salir a hacer la compra con la mente sana, y elaborar nuestros propios menús”

Muchas veces, la diabetes, que es una patología silente y progresiva, se diagnostica tras una complicación, normalmente en forma de enfermedad cardiovascular. En su abordaje, el especialista en medicina interna es clave por ser una patología que acarrea múltiples complicaciones de salud y afecta a múltiples órganos diana, entre ellos el corazón, los riñones y el cerebro.

La doctora Lola García de Lucas sugiere que para comer bien debemos elaborar nuestros propios menús cada día, evitando los azúcares refinados y los alimentos procesados. La clave es salir “a hacer la compra con mente sana”. Y por supuesto, hacer más ejercicio, evitando el sedentarismo.

Hay alternativas para hacer los platos sanos y sabrosos

Nadie dice que no consumamos algún día un dulce, pero este debe ser casero y edulcorado con alternativas al azúcar. La doctora Maribel Pérez Soto incide en que “si queremos disminuir los azúcares refinados de la dieta, tenemos que dejar de tomar dulces, pasteles y bollería industrial. Podemos sustituirlos por bizcochos que cocinemos en casa, utilizando cereales y harinas integrales, y edulcorarlos con dátiles, calabaza o boniato asado”.

Otra estrategia, recuerda el doctor Pedro Pablo Casado, médico internista miembro de SEMI y coordinador del Grupo de Trabajo de Diabetes, Obesidad y Nutrición de SEMI, es condimentar nuestros platos con otros productos, como pueden ser la canela o la vainilla, y de esta forma suplementar esa ausencia potencial de sabor si quitamos el azúcar”.

Igualmente, si hablamos de bollería, también debemos mencionar las bebidas azucaradas, que afectan negativamente a nuestra salud. El doctor José María Fernández, médico internista miembro de SEMI, indica que, eliminando las bebidas azucaradas, “no solo no perderás en sabor, sino que ganarás en salud: reduciendo de forma significativas las kilocalorías ingeridas, disminuyendo así la progresión a una posible diabetes, y si ya la padeces, mejorando de forma clara su control”.

Como alternativa al azúcar, tenemos los edulcorantes que, como indica el doctor Alfredo Michán “no afectan al nivel de glucemia en sangre y, hasta la fecha ningún estudio ha podido demostrar que sean perjudiciales”.

El doctor Pablo Miramontes: “Debemos conocer la información nutricional de los alimentos: la cantidad de azúcares añadidos, de grasas saturadas o si son procesados”

Otro consejo fundamental es que nos acostumbremos a estudiar las etiquetas de los productos cuando hacemos la compra. El doctor Pablo Miramontes, médico internista miembro de SEMI, pone el acento en que todos debemos tomar conciencia de la alimentación que seguimos y convertirla en una herramienta de prevención de la salud.

Su mensaje es que “dentro de la planificación del tratamiento dietético de los pacientes diabéticos es muy importante conocer la información nutricional de los alimentos. Es por ello, que cuando vayamos a elegir un determinado tipo de alimento deberemos tener en cuenta la cantidad de azúcares añadidos, de grasas saturadas o si son alimentos más o menos procesados. Ello nos va a poder ayudar a hacer una dieta mucho más adecuada”.

Hablamos de azúcar en bollería y refrescos, pero ¿qué ocurre con la fruta? ¿Y las vitaminas que necesita nuestro organismo? La respuesta es que podemos consumirlas, pero con precauciones. La doctora Lola López, médico internista miembro de SEMI, incide en que “los pacientes diabéticos necesitan añadir fruta a su dieta, igual que cualquier otra persona. Lo importante es saber qué fruta tomar. Vamos a evitar todo tipo de fruta que venga procesada, en forma de compota o mermelada, así como aquellas frutas que estén secas, como las pasas, dado que el volumen es pequeño y la concentración de glucosa muy alta”.

Para aquellos pacientes que desconocen el significado de la palabra ‘ultraprocesado’, el doctor Pablo Pérez, miembro de SEMI y director Científico del IMIBIC, indica que “los alimentos ultraprocesados son aquellos que han sufrido algún tipo de procesamiento industrial, como son las patatas chips, los embutidos o los productos de bollería. Son alimentos muy ricos en sal, azúcares añadidos y en grasas trans, que son perjudiciales para la salud”.

Todas estas medidas, seguidas a diario, pueden ayudarnos a evitar el riesgo de diabetes, a controlarla si ya la padecemos, y a disminuir también nuestros riesgos cardiovasculares. La doctora Juana Carretero, vicepresidenta primera de la SEMI, recuerda que “la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI) está siempre al lado de las personas con diabetes”. Por eso este año, insiste en este reto que se lanza hoy día catorce pero que debemos adoptar como hábito cotidiano : “para mantener la diabetes a raya, cero azúcar”.

Cada kilo que pierde una persona obesa reduce un 43% el riesgo de diabetes

Recientemente, en la conferencia sobre “diabetes y enfermedad cardiovascular”, que tuvo lugar en el Congreso de la Sociedad Española de Cardiología celebrado en Mallorca, el doctor David González Calle, cardiólogo de la Unidad de Cuidados Críticos Cardiovasculares del Hospital Clínico Universitario de Salamanca, explicó que la enfermedad diabética conlleva un aumento del riesgo cardiovascular que afecta casi al 90% de los pacientes con diabetes mellitus tipo 2. Además, destacó que el 75% de las muertes en pacientes diabéticos están causadas por problemas cardiovasculares, con lo que la combinación de ECV y diabetes es muy peligrosa, por las complicaciones que conlleva.

Como respuesta a esta situación, David González Calle cree que, “hay que pasar de un modelo de atención paternalista a un modelo más autónomo, en el que el paciente conozca su enfermedad, el pronóstico y sea capaz de tomas decisiones para lograr el mayor control posible”.

En la charla también se subrayó que un gran porcentaje de los pacientes diabéticos son pacientes de alto riesgo o muy alto riesgo cardiovascular  y que, además, la gran mayoría tienen sobrepeso u obesidad, que incrementa el riesgo de complicaciones y de muerte.

En este sentido, y en cuanto a la prevención, el doctor recalcó la importancia de mantener a raya los factores de riesgo ya que por cada kilo que pierde un paciente con obesidad reducimos un 43% el riesgo de desarrollar diabetes.