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G. Elorriaga
Domingo, 5 de noviembre 2023
El desierto del Sahara se aproxima a las playas atlánticas en Senegal, mientras que al sur los bosques tropicales anuncian los ecosistemas húmedos. El país posee diversos hábitats y un gran potencial turístico. Mamadou Dia no cree que el futuro radique en fomentar la llegada ... de fondos extranjeros. «No nos interesa que inviertan más en el país, con que nos dejasen lo que es nuestro la cosa cambiaría», aduce y acude a los ejemplos de Arabia Saudí y Qatar. «Ellos deciden sobre su petróleo. Nosotros poseemos todos los recursos del mundo, pero no lo tenemos para nosotros».
La paz no es un buen negocio, en su opinión. «La agitación permite que puedan sacarlos más rápido», denuncia, y advierte: «Nuestra estabilidad significa vuestra pobreza. Cuando nosotros tenemos miseria vosotros vivís bien y cuando decimos que nuestros recursos son para nosotros primero, os sentís amenazados».
La situación de Níger ejemplifica ese presupuesto. «Sus minas de uranio alimentan las centrales nucleares de Francia y aquel país exporta energía, mientras que los nigerinos carecen de electricidad», explica. «La desorganización es lo que teníamos hasta ahora». El reciente golpe de Estado ha cambiado un régimen favorable al Elíseo por otro abiertamente hostil. «Es importante que los políticos respondan por la dignidad de la juventud, hay que crear proyectos que los beneficien. Si no, es muy probable que la desesperación se manifieste y crezca la turbulencia».
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Gerardo Elorriaga
Senegal constituye un Estado inusual en el continente africano porque sus gobiernos civiles nunca se han visto sacudidos por alzamientos militares. Sin embargo, en los últimos años, ha experimentado disturbios. «No es una democracia real, pero da para soñar». El líder de la oposición se encuentra en la cárcel. «Los nuevos líderes son menores de 35 años, les están frenando pero están ahí y habrá resultados». Mamadou Dia es consciente de la irrupción de Rusia y China en África, deseosos de reemplazar a las antiguas potencias coloniales. «Son un peligro, pero más vale negociar con tres peligros que estar bajo el dominio de un solo peligro».
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