Noche de Luna roja

Al menos nos queda la poesía. Y la Luna. Con la ciencia empírica y con la NASA no hay lugar a la sorpresa: hoy viernes 27 de julio va a producirse el eclipse lunar más largo de nuestro siglo. Según cálculos del Instituto de Astrofísica de Canarias (IAC) durará 102 minutos y, dependiendo de la ubicación del observador, en España podrá ser visto (si las nubes no lo impiden) desde la misma salida de la Luna hasta casi la medianoche.

«Lo más curioso es que la Luna, al salir por el horizonte, ya estará completamente roja», afirma Víctor Lanchares, miembro de la Agrupación Astronómica de La Rioja. Por su parte no hay convocada ninguna cita pública para la observación de esta noche; cada cual podrá hacerlo desde donde le plazca. La Luna estará a la vista de cualquiera si el tiempo lo permite.

A diferencia de los eclipses solares, los lunares son visibles desde cualquier lugar del mundo una vez que la Luna está sobre el horizonte. Ni siquiera hace falta salir de la ciudad o los núcleos de población para evitar la contaminación lumínica ni protegerse la vista ni utilizar unos prismáticos; basta con situarse en un lugar preferentemente elevado y despejado y dejar que los astros hagan el resto.

Los eclipses lunares ocurren cuando nuestro satélite pasa por la sombra de la Tierra, lo que no sucede todos los meses porque la órbita de la Luna está inclinada con respecto a la de la Tierra-Sol (órbita eclíptica). El de hoy tendrá el máximo centrado en el océano Índico y su fase de totalidad durará una hora y 42 minutos, por lo que será el más largo del siglo XXI.

A escala global, el arranque del eclipse, que comienza y termina siendo de penumbra, se inicia sobre las 19.15 h. de hoy viernes (hora peninsular española, aunque en ese momento todavía no será visible en nuestro país, todavía no habrá aparecido por el horizonte) y termina a la 1.28 h. (ya del sábado). En medio ocurrirán las fases de eclipse parcial, que empieza a las 20.24 h. y termina a las 0.19 h.; y de eclipse total, entre las 21.30 h. y las 23.13 h., con un máximo exactamente a las 22.21'46''. Estas dos etapas se podrán ver desde España (en La Rioja hoy la salida de la Luna está prevista a las 21.29 h.), aunque el tiempo de observación dependerá de cuando aparezca la luna en cada territorio.

Desde África oriental podrá observarse el eclipse en su totalidad, y desde la Europa occidental (España, Portugal, Reino Unido, Francia o Italia) solo podrá observarse la segunda parte del eclipse con la Luna 'amaneciendo' ya roja en el horizonte este.

Durante la totalidad, se podrá comprobar que la Luna no desaparece de la vista sino que adquiere una tonalidad rojiza. Esto se produce porque la atmósfera de la Tierra, que se extiende unos 80 kilómetros más allá del diámetro de nuestro planeta, actúa como una lente que desvía la luz del Sol. Al tiempo, filtra eficazmente los componentes azules de su espectro y deja pasar solo la luz roja, que será reflejada por el satélite. Así, la Luna adquiere el resplandor cobrizo tan característico. Es la llamada 'Luna roja' o la más dramática 'Luna de sangre'.

Después de dos años sin eclipses totales de Luna en Europa, habrá que esperar otros seis meses para repetir la experiencia, en enero de 2019, según el IAC.

Por otro lado, el eclipse de hoy coincidirá con la oposición de Marte, lo que hará de este un fenómeno astronómico especial. Según explica el astrofísico del Planetario de Pamplona Fernando Jáuregui, Marte estará en su punto más brillante en mucho años. El planeta rojo y la Luna roja aparecerán juntos en la misma parte del cielo después del atardecer.

En todo caso, la noche de hoy es una buena excusa para comenzar a disfrutar durante el verano de nuestros cielos estrellados. La Reserva de la Biosfera de La Rioja de los valles del Leza, Jubera, Cidacos y Alhama, declarada destino turístico Starlight, es una comarca privilegiada para la observación sin contaminación lumínica. Y la Agrupación Astronómica de La Rioja guiará tres salidas a Ocón (el 3 de agosto), Villarroya (11) y Préjano (14) para contemplar estrellas y constelaciones.

Como enamorados de la Osa Mayor. Y de la Luna.