Interior intenta limitar el acceso de los diputados a los vídeos de la tragedia de Melilla

El número dos de Interior, el secretario de Estado de Seguridad, Rafael Pérez Ruiz, remitió el pasado viernes por la tarde una carta al presidente de la comisión de Interior, el exministro José Luis Ábalos, en la que ya avisa de que la intención del ministerio es limitar el «visionado» a una sola «sesión». La misma tendrá lugar este viernes próximo (25 de noviembre) en la subsede de Interior, en el número 7 de la calle Amador de los Ríos en Madrid. Pérez Ruiz no deja lugar a dudas de que esa única sesión en Interior es exclusivamente para los diputados, por lo que estos no podrán ir acompañados de peritos o expertos para poder valorar los vídeos.

«Un responsable de la comandancia de la Guardia Civil de Melilla, órgano depositario y custodio de todas las imágenes captadas el citado día, se desplazará expresamente hasta la señalada sede con una copia de todos los archivos que contienen las imágenes y se pondrá a disposición de sus señorías para cualquier pregunta o aclaración que sobre las imágenes soliciten», concluye la misiva de la mano derecha de Grande-Marlaska, a la que ha tenido acceso este periódico. En esa carta, como mucho, se da la opción de que esa sesión restringida de los videos se celebre otro día. En ningún caso Interior oferta que el visionado de las imágenes de la tragedia sea público.

Esta carta ha sido muy mal recibida por la mayoría de representantes de la comisión de Interior, incluidos los socios de Sánchez. Buena parte de los grupos habían solicitado otros formatos para poder analizar esas polémicas imágenes con más sosiego. Entre esas fórmulas estaba que los vídeos se vieran de manera pública e íntegra en la comisión de Interior, totalmente en abierto; o que, al menos, fueran vistos en sede parlamentaria por los diputados tantas veces como necesiten.

La mayoría de los grupos apostaba por un modelo como el que se aplicó tras otra tragedia migratoria. Se trata de la del Tarajal en febrero de 2014, cuando 15 inmigrantes fallecieron en un playa de Ceuta mientras la Guardia Civil lanzaba pelotas de goma a las personas que intentaban ganar a nado territorio español. El Gobierno de Mariano Rajoy acabó entonces mostrando públicamente las imágenes semanas después.

Grande-Marlaska, que ha acusado al Ejecutivo del PP de haber manipulado aquellas imágenes de hace ocho años, se enfrenta también él ahora a las sospecha de que los vídeos que Interior no ha judicializado, y que solo ha remitido al Defensor del Pueblo y la Fiscalía, están editados y que también han sido cercenados. Tanto el Ministerio Público como la oficina que encabeza Ángel Gabilondo han reclamado al ministerio las imágenes íntegras del 24 de junio. El Defensor, de hecho, ha denunciado que le falta casi una hora y media de grabaciones clave.

En cualquier caso, los diputados quieren ver las imágenes íntegras antes del 30 de noviembre, cuando Grande-Marlaska volverá a comparecer, por segunda vez, ante el Pleno del Congreso para dar explicaciones sobre la tragedia acaecida en Melilla hace ya casi cinco meses.