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Un día después de que Manuel García Castellón dejara entrever en un auto que Carles Puigdemont no podría acogerse a la futura ley de amnistía porque está imputado en un procedimiento por terrorismo por liderar Tsunami Democràtic, en el que se investiga el presunto «ánimo ... homicida» de esta plataforma en sus protestas contra la condena del 'procés', el magistrado de la Audiencia Nacional ha dado otra vuelta de tuerca: ordenar diversas diligencias para aclarar si Tsunami tenía en su punto de mira al mismísimo Felipe VI. En concreto, en un nuevo auto de 14 páginas dictado este viernes, el instructor afirma que la plataforma podría «tener en mente» alguna actuación contra el Rey o «al paso de su comitiva» en una visita a Barcelona.
Aunque el juez apunta en su auto que esa acción podría haber tenido lugar durante la entrega de los premios Princesa de Girona, no es así. Según han desvelado a este periódico mandos de la investigación sobre Tsunami, esa supuesta «actuación» contra Felipe VI a la que se refiere el magistrado y que no llegó a producirse iba a tener lugar el 20 de julio de 2020 durante el viaje que los Reyes hicieron a Cataluña, en el marco de la gira a varias comunidades tras los meses más duros de la pandemia. Aunque ese día tenían previsto visitar por la mañana el Monasterio de Santa María de Poblet, en Tarragona, y por la tarde asistir a tres actos en Barcelona (un encuentro en el Círculo de Economía, una visita a la Sagrada Familia y otra al Barcelona Supercomputing Center), finalmente solo se celebró la visita a la abadía. Zarzuela decidió limitar la visita a la provincia tarraconense después de que el entones president de la Generalitat, Quim Torra, pidiera a la ciudadanía que se movilizara contra la presencia del jefe del Estado.
El titular del Juzgado de Instrucción 6 de la Audiencia Nacional llega a la conclusión de que Tsunami había puesto los ojos en Felipe VI por una serie de conversaciones interceptadas por la Guardia Civil el 12 y 13 de julio de 2020 (solo una semana antes de la visita ya anunciada por entonces) entre uno de los investigados de este sumario, el empresario Josep Campmajó, y una persona con el nombre de usuario Xuxu Rondinaire, del que se sospecha que podría ser un miembro de los Mossos d'Esquadra. Ese policía autonómico, cree el juez, pudo desvelar a la plataforma independentistas datos del despliegue de seguridad del jefe del Estado en sus desplazamientos a la ciudad condal.
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En el informe en el que la Guardia Civil analiza estos mensajes a través de la aplicación Wire, se apunta la intencionalidad de los miembros de Tsunami de realizar una actuación de protesta contra Felipe VI por el uso de la expresión «Guardia R», que «con toda probabilidad haga referencia a la Guardia Real». Este supuesto agente, señala el juez, en su comunicación con el empresario «comienza a explicar pormenorizadamente diferentes aspectos relativos a los preparativos de seguridad de una comitiva que, por las referencias expresas, se entiende que pudiera tratarse de una comitiva real».
Los dos interlocutores –revela el magistrado– hacen referencia a una conversación anterior, que no fue intervenida pero que el instructor sospecha, no obstante, «que sería el prólogo de las ideas expuestas» por Xuxu Rondinaire, referidas a la «exposición detallada del despliegue de seguridad estándar realizado en los desplazamientos del monarca». Esa exposición, apunta García Castellón, incluía todo tipo de informaciones: desde el uso de vías rápidas desde el aeropuerto hasta el recinto donde se celebra el acto a la composición de la comitiva móvil con la disposición de los vehículos de la Casa Real, los Mossos o las ambulancias, pasando «por los reconocimientos realizados de forma permanente sobre el recorrido y la disposición de fuerza policial en cruces, puentes, intersecciones etc».
Para el instructor son reveladores de la intención de Tsunami unos comentarios efectuados por el citado y supuesto mosso Xuxu Rondinaire: «Desde unas horas antes la Guardia R da pasadas adelante y atrás por todo el recorrido y va informando de novedades. Explícame que queréis hacer y os diré si vale la pena o es perder el tiempo como en el Camp Nou. Un par de horas antes, dos veces hacen el recorrido con toda la comitiva (sin la personalidad). Y la comitiva es larga».
La referencia a «perder el tiempo como en el Camp Nou», indica el juez, conduce «inevitablemente a la acción ejecutada por Tsunami» el 18 de diciembre de 2019, y «cuyo resultado no estuvo a la altura de lo que se esperaba por la organización». Se refiere el magistrado al fiasco que supuso el llamamiento por parte de la plataforma a bloquear los accesos al campo durante el 'clásico' que tuvo lugar ese día. Solo unas decenas de miembros de la plataforma se congregaron en los alrededores del estadio.
Al margen de la investigación sobre el supuesto intento de actuar con el jefe del Estado, García Castellón ordena otras diligencias, dejando claro que no tiene la más mínima intención de abandonar el sumario de Tsunami pese al propósito del Gobierno de amnistiar a los doce imputados que están en esta causa, entre ellos el propio Puigdemont y la secretaria general de Esquerra, Marta Rovira. En la misma resolución, el magistrado pide más datos sobre el turista francés fallecido durante la toma de El Prat por Tsunami y sobre el corte de la autopista AP-7, otra acción de la plataforma en otoño de 2019.
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