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El Partido Popular exporta la presión contra el régimen de Nicolás Maduro en Europa y eleva la presión contra el Gobierno de Pedro Sánchez. Este viernes, sin pedir expresamente que España llame a consultas a su embajador en Venezuela, los populares reprocharon al presidente del ... Gobierno no defender «la democracia en Venezuela». «Parece mentira que este Gobierno retirase al embajador en Argentina, que es una democracia, y, sin embargo, mantenga al de Venezuela que, aunque Sánchez no lo vea, es una dictadura», reclamó Esteban González Pons, responsable de la política internacional del PP y eurodiputado.
Pons, que viajó junto a Alberto Núñez Feijóo a Grecia, instó en un vídeo distribuido a los medios a normalizar las relaciones con Argentina e Israel tras la ruptura del Ejecutivo de Sánchez primero con Milei y, más tarde, con Netanyahu, por el reconocimiento unilateral del Estado de Palestina. Asimismo, aplaudió las palabras de la ministra Margarita Robles frente al «silencio» de Sánchez, que «no sabe, no quiere o no es libre» para admitir que Venezuela es «una dictadura».
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El PP forzará el próximo martes tanto en la Eurocámara como en el Senado sendas iniciativas para el reconocimiento de Edmundo González Urrutia como presidente electo de Venezuela, tal y como aprobó el Congreso de los Diputados el pasado miércoles con los votos en contra del PSOE y de los grupos de izquierda.
La aprobación en la Cámara alta, donde el PP goza de mayoría absoluta, se da por descontada. Y los de Feijóo se muestran confiados en que la propuesta también saldrá adelante en Estrasburgo por la presencia mayoritaria de su grupo político en el Parlamento Europeo frente a la postura que mantiene el Ejecutivo español de no reconocer la victoria del candidato de la Plataforma Unitaria Democrática (PUD).
La tensión entre el Ejecutivo de Sánchez y el régimen de Maduro fue uno de los temas que trató el líder del PP tras su reunión con el primer ministro griego, el conservador Kyriákos Mitsotákis. Desde Atenas, el jefe de la oposición confirmó ante los medios que contará con el apoyo de los eurodiputados griegos de Nueva Democracia en la votación que se celebrará en la Eurocámara la semana que viene. «Esto empieza y termina por reconocer al presidente electo, y en hacer la postura extensiva a toda la Unión Europea. Hemos de reconocer a Edmundo González como presidente electo», subrayó Feijóo.
Un día después de que Sánchez recibiese al opositor venezolano en la Moncloa tras haber recibido asilo en España, el líder del PP lamentó que el Gobierno «no solamente ha desoído el resultado electoral en Venezuela, sino que ha desoído el mandato del Congreso de los Diputados para reconocer como presidente electo al ganador de las elecciones venezolanas». «Es importante y es un mensaje a la política exterior de España y al posicionamiento del señor Sánchez. Lamento profundamente que España no defienda la democracia en Venezuela, por intereses políticos, ideológicos del Gobierno español. Estamos dando un pésimo ejemplo a la comunidad internacional», zanjó Feijóo, al tiempo que eludió responder cuándo tiene pensado reunirse con González Urrutia en Madrid.
Las votaciones en el Parlamento Europeo y Senado se producirán en un contexto de alto voltaje diplomático después de que la Asamblea Nacional de Venezuela haya amenazado con romper relaciones diplomáticas y comerciales con España una vez que el Congreso español se posicionó contra Maduro y tras las declaraciones de Robles.
Tras su encuentro con el primer ministro griego, el líder del PP también ensalzó la política migratoria de Grecia y ha lamentado que en España, la inmigración crezca cuando gobiernan los socialistas. «No es una crítica, son los datos», adujo. A su juicio, el país heleno ha puesto en marcha una política de migración «justa, austera, humanitaria y sin bandazos» porque ha trabajado en ella «con mucho más rigor que España».
«Nuestra política migratoria», señaló, «tiene que contar con la implicación de la Unión». En este sentido, trasladó a Mitsotakis el plan de control migratorio del PP que cuenta con el respaldo de 14 comunidades y propone movilizar fondos europeos, intensificar la vigilancia fronteriza activando los recursos de Frontex y el apoyo de la Agencia de Asilo de la UE e impulsando la democracia pública en los países de África buscando la colaboración de terceros países y si estos no quieren colaborar tendrá que haber consecuencias«, afirmó.
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