Del 2 de enero al 2 de abril: tres meses sin celebrar un triunfo

Era un 2 de enero. Aquel día se disputó la jornada 20 del campeonato y el conjunto de Sergio Rodríguez se medía a sus vecinos del Mirandés con el objetivo de conseguir la octava victoria de la competición. Dicho y hecho. Los riojanos se impusieron a los burgaleses (2-1) gracias a los goles de Paulino y Ander Vitoria y acababan la jornada en el puesto 12 de la clasificación con 8 puntos más que la zona de descenso.

Ahora es 2 de abril. Han pasado tres meses desde entonces. Tres meses en los que los logroñeses no han vuelto a saborear el dulce sabor de una victoria. Doce partidos desde entonces: seis empates; seis derrotas. ¿Triunfos? Ninguno. Cómo ha cambiado el panorama blanquirrojo en tres meses.

La primera derrota llegó ante un rival directo, el Zaragoza (2-0) y desde entonces los riojanos se han marchado de vacío frente al Sporting (0-4), el Alcorcón (1-0), el Mallorca (0-1), el Málaga (0-1) y el Espanyol (4-0). Ante el Oviedo (0-0), el Sabadell (0-0), el Lugo (0-0), el Albacete (1-1), de nuevo el Zaragoza (1-1) y la Ponferradina (1-1), el bloque de Sergio Rodríguez, al menos, se llevó un punto.

Curiosamente esa racha pésima no ha provocado que los blanquirrojos caigan a posiciones de descenso en ningún momento desde aquel 2 de enero. Eso sí, como es lógico, su colchón se ha visto muy mermado. Tanto que ahora mismo la UD Logroñés está solo un punto y un puesto por encima de los puestos de castigo.

Y lo que es peor, de los equipos que están peleando con él por mantener la categoría ninguno lleva tanto tiempo sin ganar. Se acerca a esa situación el Lugo, que logró su última victoria el 23 de enero, pero los demás han conseguido marcharse triunfales de algún partido en los meses de febrero y marzo, algo que la UD Logroñés no puede decir.

Era un 2 de enero. Desde entonces ha habido 36 puntos en juego y la UD Logroñés solo ha sido capaz de sacar seis. Ahora los blanquirrojos tienen por delante diez partidos para acabar la temporada. Treinta puntos en juego en los que el botín debe ser bastante más suculento si quieren continuar en Segunda División. O reacción o descenso.