La Rioja necesita quintuplicar en dos años la red pública de recarga del coche eléctrico

La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (Anfac) acaba de actualizar su mapa de infraestructuras dispuestas para los coches eléctricos. La Rioja cuenta en estos momentos con 107 puntos de recarga, apenas veinte más que hace un año, y tanto las aspiraciones del Gobierno central de descarbonizar el parque automovilístico como, sobre todo, las fijadas por la Unión Europea para reducir las emisiones de C02 en los Objetivos Fit For 55 parecen cada vez más inalcanzables.

De hecho, hace un año se fijaba el reto de cerrar 2023 con 394 'electrolineras' y ahora esa meta es ya mucho más mesurada: la nueva pretensión pasa por alcanzar a 31 de diciembre los 266 cargadores eléctricos. Con todo, para ello habría que multiplicar por dos veces y media la cifra en cuatro meses y medio.

Y si el horizonte se sitúa en el año 2025, el camino que queda todavía por recorrer en nuestra comunidad es sumamente ambicioso. La UE considera que La Rioja, dentro de dos años, debería contar con 549 'electrolineras', lo que supone multiplicar por cinco la cifra actual, en una proporción algo mayor que en el conjunto de España, donde según el informe de Anfac habría que pasar de las 20.243 a 91.334. Los objetivos establecidos por Europa «no se cumplen sólo con el esfuerzo del sector, sino que precisan de un gran esfuerzo por parte del resto de los actores», señala José López-Tafall, director general de la patronal.

Tilda de «imprescindible» el compromiso de los gobiernos central y autonómicos «para implantar la infraestructura necesaria. La industria de la automoción está liderando la descarbonización y ya está poniendo en el mercado una amplia oferta de vehículos electrificados». Pero los «exigentes objetivos políticos» en materia de reducción de emisiones «exigen establecer medidas a la altura de esas ambiciones», añade López-Tafall.

Los puntos de recarga se diferencian por la potencia y por el tiempo que debe estar el coche enchufado. La gran mayoría son de menos de 22 kilovatios, es decir de carga lenta, ya que implican tres horas de conexión.

El 'Mapa de infraestructuras de recarga de acceso público en La Rioja' elaborado por la patronal del automóvil apunta que 132 de las 266 'electrolineras' previstas al cierre de año sean de ese tipo de carga lenta, 24 de una potencia entre 22 y 50 kW –una hora y veinte minutos de recarga– y otras 84 entre 50 y 150 kilovatios –entre 27 y 30 minutos de 'conexión'–. Asimismo, el documento contempla que en el trazado de la autopista AP-68 haya ocho cargadores para vehículos pesados como autobuses y camiones, cuatro de 350 kilovatios y otros cuatro de 800.

En la proyección que hace Anfac sobre el despliegue de puntos de recarga público del coche eléctrico para nuestra comunidad con el objetivo de alcanzar los 549 en el año 2025 se detalla que 254 serían de menos de 22 kW, 51 entre 22 y 50 kilovatios y 187 entre 50 y 150.