Rachas de viento de hasta 138 kilómetros por hora provocan numerosas incidencias en La Rioja

La Rioja estuvo ventosa este lunes. Y mucho. Un reventón de aire ha provocado diversos daños en la comunidad, donde se han contabilizado un total de 62 incidencias, aunque no se han registrado daños personales.

Los sucesos tuvieron lugarprincipalmente en la zona centro. Consistieron en la caída de ramas y árboles, tanto en cascos urbanos, como en carreteras. De ellos, cabe destacar el vuelco de un camión en la AP-68 a su paso por Lardero, la caída de un árbol sobre un vehículo en la calle Estambera de la capital riojana, y el desprendimiento de cascotes en un edificio de la avenida del Pilar en Calahorra.

A causa del vendaval de este lunes la Policía Local de Lardero recibió muchas llamadas por daños materiales. Lo más significativo fue que una caseta voló desde un ático en la esquina de la calle Fermín Gurbindo con la avenida de San Marcial, sin causar daños personales. También voló un tejado de chapa en el barrio de Bodegas que arrancó un cable que provocó un corte temporal del suministro eléctrico en la zona.

En el polígono industrial La Portalada el viento derribó árboles como el situado junto al avión de la empresa Dulces El Avión, invadiendo parte de la calzada. En la mañana del martes el árbol permanecía sobre las calle, señalizado y dificultando el tráfico.

En el parque del Iregua de Logroño, sobre todo en la zona más próxima a Puente Madre (Villa mediana), el vendaval derribó varios árboles cortando los caminos peatonales.

En Villamediana de Iregua tomaron la decisión de cerrar las instalaciones deportivas municipales por la tarde por precaución y para evitar problemas con la carpa de las piscinas porque voló alguna pieza. De la guardería también se desprendieron dos placas, así como tejas y paneles de otros edificios, árboles rotos y algún vallado perimetral de un edificio residencial.

Las rachas de viento más altas alcanzaron los 124 kilómetros por hora en Ezcaray, los 117 de San Román, los 114 de Urbaña, los 110 de Moncalvillo y los 100 de Anguiano.

Logroño, por ejemplo, vivió cerca de las 14.30 horas un episodio de fuertes vientos que no duró mucho pero llegó a causar destrozos, como árboles caídos así como los bomberos tuvieron que intervenir en alguna fachada.

Según registra el SOS Rioja, en la capital riojana la máxima a las 14.45 horas fue de de 74,2 kilómetros hora, aunque es cierto que fue 15 minutos antes cuando los viandantes pudieron sentir las rachas más fuertes que también arrastraron sillas y mesas de terrazas y vallas.

Otras zonas de La Rioja sufrieron también la fuerza del viento, como Santo Domingo, con 66 kilómetros por hora, Villoslada, donde llegó a casi 80 kilómetros por hora; Ocón, con 85 o Torrecilla, donde rozó los 100.

En Calahorra hubo un desprendimiento de cascotes en un edificio de la avenida del Pilar.

Por otra parte, más de 20 metros lineales del tejado del teleclub de La Villa de Ocón volaron por el viento de 110 kilómetros por hora (cifra registrada en el equipo de medición del pueblo). El tejado había sido reformado hace un año y las tejas cayeron a la calle, encima de los coches, contra canaleras, sobre otras cubiertas.... Se trata de un edificio propiedad de la Diócesis de Calahorra y La Calzada-Logroño, cedido al Ayuntamiento de Ocón.

El Consistorio ya se ha puesto en contacto con la Diócesis para informar sobre lo sucedido, según informa Sanda Sáinz.

En Corera, de 14.00 a 17.00 horas los vecinos vivieron fuertes rachas de viento que, además de derribar árboles, destrozado el parque a causa de las piedras y la cubierta de una casa con cubierta 'sandwich', imitación teja, donde los paneles salieron volando golpeando los tejados de los vecinos y arrasando con tejas, chimeneas, antenas, canalestas y hasta una caja de la fibra que estaba a una distancia de más de 200 metros.

El acalde, Benjamín Fernández, aclara que nadie estaba en la calle y no hubo heridos.

Los bomberos estuvieron más de dos horas retirando antenas y materiales sueltos de los tejados y árboles de la carretera.

En Navarrete, el vendaval del lunes afectó, sobre todo, al complejo deportivo, donde un árbol derribado por el viento tumbó una farola y a su vez, está la valla de las canchas de tenis, invadiendo las mismas.

En la mañana de este martes operarios trabajaban para retirar los árboles dañados junto a la carretera de Entrena.

En estos momentos, el huracán Kirk, situado en el centro del Atlántico norte, se está desplazando hacia el noreste a una velocidad de 48 km/h y tiene asociados unos vientos máximos sostenidos próximos a los 120 km/h (categoría 1 en la escala de Saffir-Simpson). Se espera que en las próximas horas continúe debilitándose, al moverse sobre aguas más frías y hacia un ambiente menos favorable para este tipo de ciclones. Como resultado, es muy probable que, durante la tarde de hoy, lunes, pierda sus características tropicales, transformándose así en una potente borrasca atlántica extra-tropical que mantendrá el nombre Kirk y seguirá produciendo vientos muy fuertes en una amplia zona a su alrededor.

Durante el martes 8 la borrasca Kirk se desplazará rápidamente hacia el este, pasando su centro por las proximidades del litoral gallego y del mar Cantábrico entre la tarde del martes 8 y el miércoles 9. Como consecuencia, producirá un temporal atlántico fuerte en los litorales gallegos y cantábricos, rachas de viento muy fuertes en buena parte de la Península, incluso localmente huracanadas, y precipitaciones generalizadas en las vertientes atlántica y cantábrica. Debido a la incertidumbre en la evolución del sistema y a la magnitud potencial de los impactos, se recomienda seguir atentamente las actualizaciones de las predicciones.

Se espera que los vientos del sur-suroeste comiencen a arreciar a partir de la tarde del martes, con intervalos de viento fuerte en los litorales gallegos y rachas muy fuertes en Galicia, cordillera cantábrica y norte del sistema ibérico. Las precipitaciones se irán extendiendo por el tercio noroccidental peninsular, y es probable que sean localmente fuertes y persistentes en el oeste de Galicia.

Desde las primeras horas del miércoles 9 se espera temporal fuerte en los litorales atlánticos gallegos, con vientos muy fuertes del sur y suroeste (8 o 9 en la escala de Beaufort) y mar combinada del oeste con olas de 6 o 7 m de altura significativa; durante el día, el temporal irá extendiéndose al resto del Cantábrico, con vientos del oeste y mar combinada en torno a 4-5 m. Las rachas muy fuertes, del sur y suroeste, se extenderán por buena parte de la Península, salvo el valle del Ebro, suroeste peninsular y litorales del este, soplando con mayor intensidad en el cuadrante noroeste (rachas de 80-100 km/h en zonas de la meseta norte y en torno a 100 km/h en Galicia y área Cantábrica, alcanzando localmente los 120 km/h) en zonas altas del norte de Galicia, de la cordillera cantábrica y del Pirineo occidental. Las precipitaciones se extenderán por buena parte de la Península, menos probables en su extremo oriental y más intensas y persistentes en el oeste de Galicia y el sistema Central occidental.

A partir del jueves, con el alejamiento de la borrasca hacia el noreste, se espera que el viento disminuya rápidamente, si bien es probable que hasta la madrugada persista el temporal en el Cantábrico oriental y las rachas de viento fuertes o muy fuertes del oeste en el área mediterránea. Las precipitaciones tenderán a ir cesando también durante el día. A pesar de ello, las cantidades acumuladas en el episodio en la zona occidental de Galicia pueden ser importantes, y se sumaran a las ya caídas en episodios anteriores, por lo que se recomienda precaución ante posibles crecidas de ríos y deslizamientos de laderas.

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