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El presidente de la Confederación Española de Organizaciones Empresariales ha sido especialmente crítico con la burocracia administrativa en nuestro país, «una maraña que lastra a las empresas» y les entorpece y desanima en el día a día, ha añadido, hasta el punto de «decir que ... mejor no hago nada». En tono jocoso, Antonio Garamendi ha dicho que todas las resoluciones publicadas en los boletines oficiales «si las pones una detrás de otra alcanzan la distancia entre Madrid y Bilbao, que son 398 kilómetros».
Durante su conferencia 'Las empresas, los nuevos retos de 2023', el líder de la patronal CEOE ha puesto en cuestión algunas de las decisiones que ha tomado el Gobierno central. El presupuesto de España, ha señalado,«contempla un déficit del 4,5%, hablamos de 60.000 o 70.000 milones de euros al año, cuando la recomendación de Europa es no llegar al 2%. A nosotros no nos cuadran las cuentas». Y tampoco comparte las previsiones de crecimiento para este año, que el Ejecutivo de Pedro Sánchez «las cifra en el 2,1% pero los analistas hablan del 1,5%».
Por ello ha pedido «ortodoxia económica y rigor presupuestario» porque ello contribuirá a que haya confianza de los inversores para apostar por la economía y las empresas en España. «Pedimos al Gobierno seguridad jurídica y estabilidad regulatoria», ha asegurado Garamendi, que ha recordado que «el Estado va a tener récord de ingresos, de más de 30.000 millones de euros, aprovechándose de la inflación».
En este sentido, no entiende que «se quiera imponer un impuesto a la carta a las eléctricas o a la banca». En materia fiscal, precisamente, ha puesto como ejemplo las decisiones de Isabel Díaz Ayuso al frente de la Comunidad de Madrid con reducción de tributos. «Nosotros seguimos reclamando más base imponible y menos tipos impositivos», ha aseverado Garamendi en un acto organizado por la Federación de Empresas de La Rioja e Ibercaja.
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Juan Carlos Berdonces
La reforma de las pensiones también ha formado parte de su discurso. La ha definido como «una derrama de gastos para que la paguemos las empresas». Los «elevados costes» de la Seguridad Social «perjudican la actividad empresarial y provocan una fuga de talento. Es un ataque en la línea de flotación a la creación de riqueza». En opinión de Garamendi, la subida de impuestos no redunda en un descenso del fraude fiscal. «En España la economía sumergida llega al 24% y en Europa al 13%», ha dicho.
Los retos que tienen por delante las empresas pasan por la digitalización, la economía circular y la sostenibilidad. «En I+D+i ha prevista una inversión del 1,3% de nuestro Producto Interior Bruto (PIB) cuando se debiera llegar al 3%. Hay mucho camino por recorrer», ha señalado el presidente de CEOE. Y también ha incidido en la formación «porque, por ejemplo, en el sector de ciberseguridad se necesitan 25.000 ingenieros».
Esta falta de profesionales también afecta a otras actividades como la hostelería o la construcción, con 100.000 puestos de trabajo para cubrir según sus cálculos. «Y las empresas de transporte de viajeros necesitan otros 10.000. Hay compañías que tienen incluso centros de formación de conductores en Marruecos», ha añadido. Esta situación, según Antonio Garamendi, es todavía más difícil de entender «cuando hay casi cuatro millones de parados. Hay que hablar de actitud y de aptitud».
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