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«Yo, como ex alumna de Escolapias quiero que los niños tengan la misma oportunidad que tuve yo al elegir este centro». Este es uno de los mensajes que se pueden leer en la puertas de Escolapias, al final de la calle Vara de Rey ... de Logroño. Hay más, todos colgados de las rejas de la puerta metálica. Todos en defensa de la escuela concertada y a raíz de que el consejero de Educación y Cultura del Gobierno de La Rioja, Luis Cacho, anunciara la eliminación de dos líneas en este centro, el más damnificado, junto a Alcaste, por las medidas del Ejecutivo regional.
«Un colegio con un ideario afín a nuestros valores humanos. Un colegio con unos profesionales que son sus maestros. Un colegio de referencia y con alumnos de gran diversidad a los que se les trata con cariño», este es otro de los mensajes. Están escritos en cartulinas de colores por parte de ex alumnos, alumnos y padres, a veces todo en uno, como el siguiente mensaje: «Escolapias es mi centro, donde me eduqué y donde mis hijos se están formando. Solo pido que se deje elección libre a los padres que quieren una educación en valores como se imparte en Escolapias». Otros mensajes, más largos, hacen referencia a la «doctrina» y el «carisma».
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La Plataforma por la Libertad de Enseñanza en La Rioja pidió el pasado viernes la dimisión del consejero de Educación, Luis Cacho «por manipular los datos ofrecidos relativos a la ratio media y mínima en educación pública y concertada» con «el objetivo intentar trasladar a la opinión pública privilegios de la escuela concertada que son falsos, tratando de justificar de esa manera medidas que son únicamente ideológicas». Y es que Cacho propuso la semana pasada suprimir siete unidades en Infantil, dos en Primaria y una más en la ESO, con los centros Alcaste, Escolapias, Salesianos y La Inmaculada como principales perjudicados, aunque también resultarían damnificados otros, como La Enseñanza y Los Boscos.
Desde entonces las muestras de apoyo a los centros educativos concertados de La Rioja se han sucedido tanto a nivel general, sobre todo por medio de redes sociales, como, en concreto, y de forma tangible, en Escolapias Sotillo de Logroño, que este lunes amanecía con mensajes de apoyo en su puerta, que se ha ido llenando conforme avanzaba el día. La APA de Escolapias ha explicado que esta es la primera acción en un colegio pero que se van a producir más y va a haber acciones conjuntas en coordinación de la plataforma.
De hecho, una madre del centro, Verónica González, ha abierto una campaña de recogida de firmas titulada 'No al cierre de las aulas de Escolapias' en la que exige a los políticos «que dejen sus ideales de lado y se centren en lo prioritario ahora: educación y sanidad». Esta campaña suma ya más de 2.800 firmas de apoyo.
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