Los cribados preventivos de cáncer retoman el ritmo pese a la presión asistencial por el COVID

La Rioja mantiene el alza de nuevos casos registrados y suma 2.033 diagnosticados más, con mayor alcance del tumor colorrectal

Teri Sáenz

Logroño

Jueves, 4 de febrero 2021, 07:19

La Rioja contabilizó en el 2020 un total de 2.033 nuevos casos de cáncer, la mayoría en hombres (1.202) y el resto (831) correspondiente a mujeres. Así lo recoge el Observatorio de la AECC que monitoriza la evolución de la enfermedad en ... el conjunto del país y confirma que el colorrectal fue el más común entre los tumores diagnosticados en la comunidad, sumando casi al 14% del conjunto. Le siguieron por nivel de incidencia el de próstata (prácticamente el 12%), mama (11,4%), pulmón (10,2) y otros de piel (6,5%).

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La estadística refleja la lenta pero constante escalada registrada en los ejercicios precedentes. Un ascenso que ha ido desde los 1.821 nuevos cuadros detectados en el 2012 a los 1.996 del 2019, superando la barrera de los 2.000 el pasado año.

ALGUNAS CIFRAS

  • 59€ de los 2.033 nuevos casos de cáncer diagnosticados en La Rioja corresponden a hombres.

  • 14% de los riojanos que se incorporan a la estadística sufren cáncer colorrectal, el de mayor incidencia en la comunidad.

  • 440 nuevos pacientes atendió el año pasado el departamento de psicología de la AECC Además, 169 precisaron atención social de la entidad.

  • 17 ayudas económicas por un importe de casi 30.000 euros concedió la AECC en La Rioja en el 2020. Asimismo, 2.500 personas han participado en programas de prevención.

El dato se presta a una doble lectura. Por un lado, constata que los tumores siguen siendo una de las patologías de mayor alcance también en La Rioja. Por el otro, refleja que en el año más convulso de la historia reciente a consecuencia del COVID, y con los recursos sanitarios volcados en combatir la pandemia, la atención al cáncer ha seguido siendo una prioridad en la comunidad. Una circunstancia más relevante aún a la vista del reciente informe de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), donde se alertaba de que, a escala nacional, el pasado ejercicio se dejaron de diagnosticar uno de cada cinco casos de cáncer. La razón: la saturación sanitaria provocada por el coronavirus, un «agujero negro» que absorbe el grueso de los dispositivos y el personal.

No ha sido el caso en La Rioja, cuyo hospital de referencia no ha sido incluido entre los 37 sobre los que la SEOM ha elaborado su estudio. En la región, las consultas, el tratamiento y cirugías de este tipo de patología no han cesado pese a una coyuntura adversa. «Los pacientes de cáncer siguen siendo un foco de atención absoluto», asevera el director adjunto a la gerencia del SERIS, Francisco Antón, sin ocultar las dificultades y renuncias que el sistema ha debido enfrentar para secundar este fin. El momento más crítico sobrevino en marzo. El virus estaba en plena eclosión y la Consejería se vio obligada a suspender los programas de detección precoz de los cánceres de cérvix, mama y colon, cruciales para anticiparse a la enfermedad. «Fueron unos meses durísimos en los que el hospital y Primaria dieron un vuelco y, efectivamente, disminuyeron los diagnósticos», relata Antón. El acumulado anual confirma que la reanudación de los cribados en mayo, junio y octubre, respectivamente, ha devuelto las cifras a la media con el propósito de recuperar la 'bolsa' de población pendiente de análisis a mediados del presente curso.

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Tampoco las operaciones de pacientes oncológicos se han visto alteradas, pese a la reconversión de algunos quirófanos en UCI. «Otras cirugías han debido suspenderse ante la acumulación de necesidades por el COVID, pero en este caso no ha habido retrasos ni reprogramaciones», garantiza. El mismo compromiso de continuidad que rige para los tratamientos y revisiones más allá de algún «desajuste puntual», según concede Antón, recalcando el rol de la comisión de tumores articulada para su seguimiento.

El parecer en la cúpula del SERIS es compartido con el de la AECC en La Rioja. «El esfuerzo que se ha hecho en todos los frentes ha sido ímprobo», asegura la presidenta de la entidad, Elena Eguizábal, al subrayar la delicada y constante atención que requiere este tipo de pacientes especialmente vulnerables. «El cáncer es otra pandemia que no va a parar a pesar del COVID, y cuando esta situación pase, la enfermedad seguirá estando ahí», advierte en el Día Mundial Contra el Cáncer. En lo que también coinciden es en la preocupación por una variable que aún está por determinar: el estadio de los nuevos tumores descubiertos. «El miedo a acudir al médico por evitar un virtual contagio y las complicaciones de la atención telefónica en los centros de salud han podido retrasar algún diagnóstico», apunta Antón, frente a lo cual también en Primaria se ha fijado que este tipo de cuadros sean preferentes. «Lo que está claro es que quienes ya estaban 'encauzados' en el proceso han podido continuarlo», aporta Eguizábal.

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El frente sanitario discurre en paralelo al que ha pilotado la AECC en La Rioja, que ha «reinventado» sus servicios obligada por las restricciones a través de consultas 'on line', y sin descuidar la ayuda social o psicológica.

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