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Día trece tras el inicio de la Fase 1, sábado. Trece días de datos desde que los riojanos vivieron el principio del final de las restricciones y la salida del confinamiento de mucha gente. Y trece días esperando un anunciado rebrote que, por ahora, sigue ... sin producirse.
Salud sigue vigilante y esperando (y haciendo pruebas: ese sábado en el CIBIR se realizó un centenar) pero por ahora sólo se aprecia retirada. Buenos datos para asentar el paso a la siguiente fase de la desescalada, la segunda, que comienza este lunes.
Eso sí, La Rioja sufrió un fallecido más por culpa del COVID-19. Y ya son 358. Un goteo que no termina y que sigue empañando lo que, por lo demás, es una evolución de la epidemia casi perfecta.
Porque por segundo día consecutivo, la comunidad no registró ningún positivo por COVID-19 ni tuvo que ingresar a nadie en los centros hospitalarios.
Así la cifra tota de positivos detectados por PCR se queda en los 4.036 de ayer. Y la noticia simbólica del día la adelantaba este mediodía la presidenta, Concha Andreu: la UCI del San Pedro dio ayer el alta al último paciente que le quedaba, así que no tiene ya ningún enfermo con coronavirus.
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Pero, como queda dicho, La Rioja no rompe su racha de mortalidad. Tras tres días seguidos sin fallecimientos la semana pasada, ahora La Rioja enlaza ocho jornadas con víctimas, 10 en total.
El fallecido era un hombre de edad avanzada y con factores de riesgo, que vivía en un centro de mayores. Así, son 205 los riojanos que han muerto tras contagiarse en una residencia de ancianos: el 57,2% del total.
Y lo demás es como habitualmente en los últimos días. Es decir, francamente bueno. Las altas siguen siendo muchas, pero evidentemente ya no pueden seguir al ritmo de los días anteriores, básicamente porque apenas quedan enfermos. Ayer fueron 49, y con ellas los casos activos descienden por debajo del centenar: ahora hay 62 enfermos de COVID-19 en la región.
Ese número de altas hace que siga escalando la cifra más positiva de esta enfermedad en La Rioja, la de quienes la han superado. Ahora ya son 3.616.
Y la estadistica de los últimos días sigue siendo realmente alentadora: sólo en los últimos siete días se han curado 568 personas, y los casos activos han pasado de 627 a 62.
Hoy la nota del departamento de Salud riojano no especificaba cuántas de esas altas correspondían a pacientes ingresados en el hospital o que esperaban en sus casas; pero es de suponer que habría pocos de los primeros, porque la cifra de personas ingresadas en los centros sanitarios riojanos no se ha movido: hay 19.
Eso sí, con una variación importante, la ya mencionada: esta mañana no había ya pacientes ingresados en la Unidad de Medicina Intensiva del San Pedro. Un día casi de fiesta en la unidad, cuyos profesionales tuvieron que lidiar, en sus peores momentos, con hasta 40 pacientes con coronavirus en una instalación que antes de la crisis tenía sólo 17 camas.
Esos 19 ingresados se reparten igual que ayer: 15 en el San Pedro, 3 (aún solo sospechosos, sin confirmar) en Calahorra y uno en Los Manzanos.
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