Rishi Sunak y Keir Starmer responderán durante una hora en la noche del martes a las preguntas los espectadores de la televisión ITV, en lo que se presenta como el primer debate de la campaña electoral. La BBC organizará, el 26 de junio, el último ... entre los dos candidatos con posibilidades de ser elegidos para la jefatura del Gobierno. La votación será el 4 de julio.
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El Partido Conservador ha calificado durante meses a Starmer y a su formación como carentes de ideas. Y por eso aseguraban que el laborista esquivaría debates. Efectivamente lo ha hecho. No asistirá al que organiza la BBC este viernes, entre siete partidos. Y, según los medios, Sunak y su equipo están considerando no participar en ese formato. Tendrían también dudas sobre un debate a cuatro, con laboristas, liberal-demócratas e independentistas escoceses.
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Iñigo Gurruchaga
La víspera del debate tuvo una sorpresa. Al mediodía, el líder del movimiento brexiter, Nigel Farage, publicó en las redes sociales que, a las 17.00, hora peninsular, divulgaría «un anuncio de emergencia sobre las elecciones». Algunos comentaristas se preguntaron con sorna si el amigo de Donald Trump iba a dar un golpe de Estado. La emergencia es que él va a ocupar la posición de líder del partido Reform UK.
Es un extraño partido, constituido como una corporación de la que Farage tiene la mayoría de acciones. El jefe le quita el puesto a Richard Trice, constructor millonario y segundo accionista, que «ha pagado un gran coste personal» por gestionar el partido, según Farage. Será el candidato en la circunscripción de Clacton-on-Sea, donde se eligió al primer diputado 'brexiter' antes del referéndum de 2016.
Es una de las ciudades costeras arruinadas en los años setenta por el despegue de los vuelos baratos a las costas del sur de Europa. Con atracciones y hostelería gastadas y una población de jubilados que trabajaron en los puertos e industrias del este de London, Clacton ha sufrido el declive de servicios públicos y la presencia de poblaciones trashumantes.
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Farage afirma que nada funciona en el Reino Unido y que el rechazo al sistema se expresa en que el partido tiene mucho apoyo en las redes sin hacer publicidad. Convencido de que los laboristas ganarán las elecciones, su plan es convertirse en oposición tras estos comicios y ganar las elecciones de 2029. En ese camino, podría presentarse a la batalla por el liderazgo 'tory' tras una derrota de Sunak.
Los signos de victoria laborista son aplastantes. Una encuesta entre televidentes de GB News, un canal que pone al frente de sus programas a diputados conservadores y tiene a Farage como su mayor estrella, ha encontrado que la ventaja de los que votarán a los laboristas con respecto a los conservadores es del 21%, la diferencia estancada en los promedios de los resultados de las encuestas.
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Una encuesta de 50.000 personas por YouGov, calculando la distribución del voto en circunscripciones vaticina que los laboristas obtendrían hoy 422 escaños frente a 140. La misma firma señala en su serie histórica sobre políticos que Farage es más popular que Starmer.
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