Rusia bombardea Kiev con ocho misiles balísticos

Según Sergii Popko, jefe de la Administración Militar de Kiev, el ataque se produjo hacia las cuatro de la madrugada y «las defensas antiaéreas destruyeron todos los misiles disparados por el enemigo». De los cuatro heridos en el distrito Darnitski de Kiev, en donde los trozos de misil causaron además un incendio, el peor parado ha sido un hombre de 31 años a quien la metralla causó graves heridas en las piernas. Por su parte, el ministro del Interior ucraniano, Ígor Klimenko, añadió que «los cristales de muchas ventanas reventaron». A través de su canal de Telegram, el alcalde de Kiev, Vitali Klichkó, aseguró que el incendio que se declaró en un edificio en construcción fue rápidamente extinguido.

Las redes sociales publican un vídeo de un enorme socavón en el barrio kievita de Bórtnichi, demasiado grande para haber sido provocado por la caída de fragmentos. Al parecer, cayó la parte del cohete que llevaba la carga y detonó al impactar con el suelo. No se han reportado víctimas a causa de esta explosión.

En cualquier caso, parece que los sistemas de defensa antiaérea suministrados a Ucrania por Occidente son cada vez más eficaces de cara a evitar que las fuerzas rusas dañen seriamente este invierno las infraestructuras energéticas del país. El portavoz de la Fuerza Aérea de Ucrania, Yuri Ignat, detalló que Moscú disparó los misiles desde el norte.

«Ustedes saben lo que es una trayectoria balística –la que resulta del lanzamiento parabólico y caída inmediata por la gravedad de su propia inercia-, por lo que el tiempo para declarar una alerta es limitado. No es la primera vez que esto sucede, los cohetes balísticos vuelan muy rápido, son más difíciles de derribar. Sólo quedan unos minutos para que la defensa antiaérea responda y los destruya», explicó Ignat.

De ahí que la alarma antiaérea sonase después de la llegada de los misiles. Mientras tanto, Kiev amanecía este lunes en medio de enorme atascos debido a que seis estaciones de metro han tenido que cerrarse por inundaciones, lo que afecta a varias líneas y se ha tenido que recurrir al aumento del número de autobuses para sustituir el servicio.