Attal acusa a la extrema derecha y la extrema izquierda de «prometer la luna» a los franceses

El debate estuvo centrado en temas como el poder adquisitivo, la inmigración, la seguridad, los impuestos, el salario mínimo, las energías renovables, la educación y la sanidad, sin que se abordaran temas internacionales. Bompard y Bardella trataron de mostrar que están capacitados para gobernar, mientras Attal defendió el balance de los siete años de Macron.

Bardella se presentó ante los franceses como el futuro «primer ministro del poder adquisitivo» y prometió bajar el bajará el IVA sobre la energía, la electricidad y los carburantes del 20 al 5,5%. Bompard defendió la propuesta de la izquierda de bloquear los precios de alimentos de primera necesidad. Attal, por su parte, prometió una bajada de los precios de la electricidad del 15%.

Tanto Bompard como Bardella prometieron que si sus partidos ganan, derogaran la reforma de las pensiones del presidente Macron, que estableció en 64 años la edad de jubilación en Francia. Bardella la tachó de «injusta sobre el plan social e ineficaz sobre el plan económico». El primer ministro acusó a sus contrincantes de «prometer la luna» y de bajar la edad de jubilación a los 60 años si ganan, lo que, según Attal, conllevará a «un aporreamiento fiscal» para poder financiar esta medida.

El líder ultraderechista instó a los franceses a votar el próximo 30 de junio y 7 de julio en las elecciones legislativas para «pasar la página a siete años de macronismo». «La alianza que yo dirijo con Éric Ciotti (derecha moderada) es la única que, en la segunda vuelta, puede ganar ante el peligro que está a las puertas del poder, el de la extrema izquierda y el de un Jean-Luc Mélenchon primer ministro», dijo Bardella. «No se dejen intimidar sobre aquellos que surfean sobre los miedos», pidió a los franceses al final del debate.

Bompard, por su parte, constató que, tras la disolución de la Asamblea Nacional y la convocatoria de elecciones legislativas anticipadas, muchos franceses tienen «miedo a ver a la extrema derecha llegar al poder en Francia». El coordinador nacional de La Francia Insumisa instó a los franceses a votar en las dos vueltas por la alianza de izquierdas para «impedir que este miedo se convierta en una realidad» y «pasar la página de Macron».

El primer ministro, por su parte, prometió que, si el partido de Macron obtiene la mayoría en la Asamblea Nacional, no aumentarán los impuestos y se mostró confiado en que los franceses votarán por ellos frente a los extremos. Attal, Bardella y Bompard confiaban en que este debate pudiera convencer a los indecisos y confirmar o invertir las tendencias que reflejan los sondeos.

El primer ministro y Bardella volverán a debatir juntos el jueves, pero en esta ocasión lo harán con Olivier Faure, primer secretario del Partido Socialista, que será el representante de la alianza de partidos de izquierda en ese debate. El partido de Marine Le Pen y Bardella parte como favorito para estos comicios con un 36% de intención de voto, seguido de la alianza de partidos de izquierda (29,5%) y el partido de Macron y sus aliados, que tiene un 20,5% de apoyos, según el último sondeo de TF1.