Con el escrutinio ya completado y la evidencia de que los ultraconservadores del partido gobernante Ley y Justicia (PiS) han perdido su mayoría -35,38% de los votos- y carecen de aliados, la oposición liberal avanza decidida a recuperar el poder en Polonia. Así lo ... hizo saber este martes el líder de la Plataforma Cívica -30,70%- y expresidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, al asegurar en un comunicado en redes sociales que está «listo para gobernar el país» junto a sus dos socios: la centroderechista Tercera Vía -14,40%- y la progresista Nueva Izquierda -8,61%-.
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El dirigente liberal y sus aliados tendrán 248 escaños en el Sejm, la Cámara Baja. Un cómodo resultado que sobrepasa la mayoría absoluta de 231 asientos, lo que les permitirá conformar una coalición estable. Sin embargo, para que Tusk pueda consumar su regreso a la jefatura del Gobierno, cargo que ya ocupó de 2007 a 2014, necesitará recibir el encargo del presidente, Andrzej Duda, cercano al PiS. Esa posibilidad parece aún remota ya que, si bien el jefe de Estado no se ha pronunciado al respecto tras las elecciones del domingo, sí dejó claro previamente que su intención sería encomendar la creación de un gabinete al partido más votado. En este caso, los ultraconservadores que, liderados por Jaroslaw Kaczynski, han llevado el timón de la política polaca en los últimos ocho años. Dos mandatos caracterizados por la abierta confrontación con la UE por cuestiones tan sensibles como el estado de derecho, la independencia judicial, la libertad de prensa, los derechos de las minorías y la migración.
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«Estoy haciendo un llamamiento apasionado al presidente, la gente está esperando las primeras decisiones, por lo que le pedimos que tome decisiones enérgicas y rápidas», instó este martes Tusk a Duda en un mensaje publicado en la red social X, antes conocida como Twitter. El jefe de Estado, en cambio, solo se ha manifestado para celebrar la histórica participación, superior al 74%, la más alta en el país desde la caída del comunismo en 1989.
En las filas del PiS tampoco parecen resignados a tirar la toalla. «Intentaremos formar Gobierno en la primera ronda. Si esto falla, la oposición tendrá sus cinco minutos», aseguró Marek Suski, el número dos del grupo parlamentario, tras conocerse el resultado oficial. Las opciones de constituir un gabinete son, en cualquier caso, remotas para los ultraconservadores ya que el único socio posible, el partido de extrema derecha Confederación -7,16% de los votos- ha rechazado la idea de sellar una coalición con la formación de Kaczynski.
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