Europa se blinda ante atentados tras los ataques de Bélgica y Francia

Al termino del cónclave de ministros de Exteriores de la UE, el presidente del Consejo Europeo, Charles Michel, reconoció que «la amenaza está presente. La tensión y el conflicto aumentan el riesgo de ataques», explicó antes de destacar que «debemos trabajar contra los discursos del odio y prevenir la violencia aumentando la seguridad».

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La presencia policial y militar se ha reforzado especialmente en Francia, donde reside una notable comunidad judía y la pasada semana fue apuñalado hasta la muerte el profesor Dominique Bernard a manos de un ruso radicalizado al islamismo. El miedo a acciones de este tipo, indiscriminadas y capaces de ocurrir en cualquier parte del país, atenaza a la población gala, que ha asistido a cruentos atentados de corte yihadista. Ahora mismo, 7.000 soldados permanecen desplegados en máxima alerta, con una mayor dedicación en París. Una muestra de la prevención ordenada por las autoridades es que este martes se produjo una nueva evacuación del Palacio de Versalles ante una amenaza de bomba. Con ésta son decenas las llamadas falsas que se han recibido para sembrar el temor entre los franceses, incluso en el homenaje que se rindió al docente asesinado.

Aparte de Francia, Alemania, el Reino Unido, Países Bajos y, fuera del ámbito europeo, Canadá y EE UU -donde el refuerzo policial es muy visible en Nueva York, los Ángeles, Miami y Houston- destacan entre los países que mayores medidas de seguridad han establecido en torno a las sinagogas, centros judíos y estadios deportivos en prevención de atentados perpetrados por 'lobos solitarios'. En el caso alemán y británico se han registrado incidentes con la aparición de pintadas antisionistas o la estrella de David marcando viviendas y comercios dirigidos por ciudadanos de origen judío, un eco de los señalamientos de la época nazi que han estremecido a la población germana. Tanto en Francia como el Reino Unido se han restringido las manifestaciones a favor de Palestina.

Algunos sectores piden al primer ministro británico, Rishi Sunak, que aumente el nivel de seguridad nacional, más todavía después de las pintadas y ataques antisemitas registradas estos últimos días en sinagogas y colegios judíos, La Policía Metropolitana ha detectado un «aumento masivo» de incidentes antisemitas tras los ataques de Hamás contra Israel y ha advertido que este tipo de acciones serán «reprimidas con todo el peso de la ley». En un acto conjunto a desactivar los delitos de odio, El jeque Ibrahim Mogra, el rabino Jonathan Wittenberg y el arzobispo de Canterbur comparecieron juntos porque «no podemos permitir que se siembren semillas de odio y prejuicio en nuestras comunidades» como resultado de la guerra en Oriente Medio.