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Donald Trump llegará a la Casa Blanca con una sentencia en su contra. El juez de Nueva York que asumió el 'caso Stormy Daniels' ha puesto fecha para la lectura del fallo por la ocultación de pagos a la exactriz porno para que guardara silencio ... sobre su 'affaire' con el magnate. Será el 10 de enero, a sólo diez días de la investidura. El magistrado, Juan Merchan, descarta una pena de cárcel y se inclina por la imposición de una libertad condicional al republicano, que ya en primavera se convirtió en el primer exmandatario de Estados Unidos condenado y ahora pasará también a la historia como el primer delincuente convicto en ocupar la residencia presidencial.
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Los abogados de Trump no han logrado parar esta causa tras su victoria electoral, a diferencia de lo ocurrido con los casos federales en su contra, incluidos el de ocultación de documentos clasificados y el de intento de anulación de los comicios de 2020, que uno a uno han quedado archivados. Merchan rechazó la inmunidad presidencial otorgada por la Corte Suprema y decidió seguir adelante con un proceso por el que el republicano fue condenado en mayo a 34 cargos. Ahora, con la fecha para la lectura de la sentencia marcada en el calendario, se espera que el equipo legal del presidente electo apele para retrasar el fallo.
El magnate, por ahora, ha clamado a través de su red social, Truth, su disconformidad con el último paso dado por Merchan, que argumenta su decisión en un escrito de 18 páginas. «Este ataque político ilegítimo no es más que una farsa amañada. El juez 'en funciones', que es un partidista radical, acaba de emitir otra orden que es ilegal a sabiendas, va en contra de nuestra Constitución y, si se permite que se mantenga, sería el fin de la presidencia tal y como la conocemos», se quejó, consciente de que una libertad condicional podría limitar sus funciones como mandatario. El día 10 podrá elegir entre escuchar la sentencia en persona o hacerlo de manera virtual.
El juez asumió que «en esta coyuntura» no conviene una pena de cárcel contra Trump y señaló que los fiscales tampoco la consideran una «recomendación factible». La culpabilidad del magnate en esta causa, sin embargo, quedó clara en mayo, cuando el jurado concluyó en un veredicto sin precedentes que el exmandatario era responsable de 34 cargos de falsificación de registros comerciales para encubrir el pago de 130.000 dólares (unos 126.000 euros al cambio) a Daniels en vísperas de las elecciones de 2016 para asegurar su silencio sobre un supuesto encuentro sexual entre ambos una década antes. No quería que aquella relación le pasara factura en las urnas y, de hecho, aquellos comicios le llevaron por primera vez a la Casa Blanca.
Donald Trump
Presidente electo de EE UU
Ahora, a un par de semanas de jurar el cargo presidencial por segunda vez, Trump y su entorno tratan de presentar este proceso judicial como una caza de brujas contra su persona. «Este caso ilegal nunca debió presentarse y la Constitución exige su sobreseimiento inmediato», defendió su portavoz, Steven Cheung, tras conocer la fecha de la sentencia. El empresario, dijo «va a seguir luchando contra estos engaños hasta que todos estén enterrados». El presidente electo tiene otro caso pendiente en Georgia, donde afronta cargos por sus intentos de dar la vuelta en este Estado al resultado de las elecciones de 2020 -en las que ganó Joe Biden- aunque probablemente este asunto quede congelado tras su regreso a la Casa Blanca.
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