Al-Assad viaja a China para estrechar lazos con Xi y buscar apoyo financiero para Siria

La Presidencia siria indicó en un comunicado publicado en su cuenta en Telegram que Al-Assad y su esposa, Asma al-Assad, fueron recibidos a su llegada este jueves al aeropuerto de Hangzhou por una delegación encabezada por el ministro de Comercio chino, Wang Wentao. Además de su encuentro con Xi, está previsto que el el sábado asista a la ceremonia de inauguración de los Juegos Asiáticos.

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En la agenda del dirigente árabe figuran también «varias reuniones y eventos» en Pekín y Hangzhou, donde «estará acompañado por una delegación política y económica». Estos encuentros tendrán como principal objetivo la búsqueda de apoyo financiero para la reconstrucción del país.

Al-Assad viajó por última vez China en 2004 para reunirse con el entonces presidente, Hu Jintao. Fue la primera visita de un jefe de Estado sirio desde que se establecieron relaciones diplomáticas en 1956. Con Pekín, Al-Assad ha encontrado siempre un aliado. No en vano, en los años más duros de la guerra civil, Pekín vetó en al menos ocho ocasiones mociones de la ONU que condenaban al régimen de Damasco.

La portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Mao Ning, ha manifestado en rueda de prensa que «la visita de Al-Assad profundizará la confianza política mutua y la cooperación bilateral en diversos campos, además de llevar las relaciones bilaterales a un nuevo nivel». «China y Siria tienen una profunda y tradicional amistad y Damasco fue una de las primeras capitales árabes en establecer lazos diplomáticos con Pekín y, desde el establecimiento de relaciones hace 76 años, las relaciones entre los dos países siempre se han desarrollado de forma sólida», ha remachado.