José Antonio Jainaga, presidente de Sidenor, y el ministro de Economía, Carlos Cuerpo.

El ministro de Economía confirma la disposición del Gobierno a acompañar a Sidenor en la compra de Talgo

Carlos Cuerpo reitera el apoyo del Ejecutivo central para dar «viabilidad» y «estabilidad accionarial», mientras la acción del fabricante de trenes se dispara casi un 7% en la Bolsa

Lucas Irigoyen

Bilbao

Jueves, 17 de octubre 2024, 12:14

El ministro de Economía, Carlos Cuerpo, ha puesto palabras al posicionamiento del Gobierno central, que ve en la apuesta de Sidenor por entrar en Talgo una vía que puede ayudar a «dar viabilidad industrial a largo plazo y estabilidad al accionariado de la compañía». ... Son los criterios que el responsable de la cartera económica del Ejecutivo ha recordado como la condición para un respaldo público. Este se vehiculizaría a través de la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales), pero Cuerpo ha pedido «prudencia» y ha recordado que es «un proceso que debe liderar la empresa y que estamos dispuestos a acompañar».

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El respaldo a la vía del industrial vasco, José Antonio Jainaga, que envió este miércoles a Talgo una comunicación anunciando su interés por «la adquisición total o parcial del capital social» de la compañía, se suma a la del Gobierno vasco. El Gabinete del lehendakari Imanol Pradales «valoró positivamente» la apuesta de un empresario con una «acreditada trayectoria».

La Bolsa también ha reaccionado este jueves. En el arranque de la sesión de los mercados, los títulos de Talgo se han disparado un 6,7% alcanzando los 3,88 euros. Una cotización que ha incremantado ya un 16% el valor que presentaba la acción el lunes, antes de que se conociera el interés del presidente de Sidenor.

Jainaga analiza la compra de la posición de Trilantic en el constructor de trenes. El fondo de inversión es el principal accionista y controla un cerca del 30% de Talgo. Pero este miércoles el presidente de Sidenor abrió la opción también de una operación por el 100% de la compañía.

Liderazgo de la empresa

Trilantic lleva años intentando vender su participación en Talgo y su apuesta principal fue la opa de Magyar Vagon que ofreció 5 euros por acción -617 millones-. Una alternativa que Mocloa vetó en agosto por «motivos de seguridad nacional». Desde entonces el fabricante de trenes ha quedado en una crisis accionarial con problemas en la gobernanza para afrontar una necesidad industrial apremiante: la de reforzar la capacidad industrial para dar salida a 4.000 millones de pedidos que ahogan a Talgo.

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Moncloa intentó activar una solución con el grupo checo Skoda, pero el fabricante de material rodante de Europa del Este no pasó de ofrecer una fusión, sin compra de acciones. Ahora, la de Jainaga parece la única vía de carácter industrial para resolver la propiedad de Talgo.

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