El Barça sentencia a un Madrid impotente

Vuelven a vivirse días convulsos en la 'casa blanca'. El inesperado tropiezo frente al Girona hace un par de jornadas borró de un plumazo el optimismo que desencadenó la racha de siete victorias en ocho partidos iniciada con el triunfo frente al Sevilla en la vigésima jornada y que permitió incluso a los más osados soñar con un triplete ya imposible. Ganó luego el Real Madrid al Levante con mucho sufrimiento y polémica arbitral incluida e hincó a continuación la rodilla ante el Barcelona en un partido de Copa que volvió a poner de manifiesto la gran carencia del equipo que vio partir en verano al artillero más letal de su historia: la falta de puntería. Dilapidaron los pupilos de Santiago Solari diez disparos, cuatro de ellos a puerta, sin pulverizar la portería de Ter Stegen, mientras que al Barcelona le bastaron dos remates entre los tres palos para firmar tres goles ya que uno lo marcó Varane en propia puerta.

El 0-3 de la Copa ha disparado las alarmas en la zona noble del Santiago Bernabéu y ha complicado los planes de Solari, que pensaba emplear el duelo de Liga con el Barça para oxigenar a un bloque muy castigado por un calendario infernal. El argentino no ha tenido más remedio que exprimir al máximo a sus hombres de confianza, escrutado al milímetro cada uno de sus pasos por una directiva que podría estar barajando planes de contingencia en caso de que una debacle de aquí al martes desencadene una crisis monumental. De aplicar todas las rotaciones con las que elucubraba y volver a salir escaldado ante el Barça, la guillotina pendería sobre el rosarino con el Ajax como única tabla de salvación.

A ello se añade el quebradero de cabeza en la zaga del Real Madrid que dejó el clásico del miércoles, del que salieron tocados Varane y Sergio Ramos. El capitán, que no podrá jugar ante el Ajax por sanción, estará a disposición de Solari, que no puede recurrir a Nacho ya que está sancionado en Liga pero confía en contar con el francés después de ver cómo trabajaba con el grupo este viernes aunque con un vendaje en su rodilla derecha a causa del golpe que sufrió en la acción del segundo tanto del Barça. De medio campo en adelante la principal duda es la presencia de Bale o de Lucas Vázquez en el extremo derecho ya que Vinicius es intocable en la izquierda, aunque Solari podría sorprender con Marco Asensio de falso 'nueve' para aliviar a Benzema.

Sí tiene intacto su margen de maniobra Ernesto Valverde, ya centenario como entrenador del Barça y con la opción de situar por delante por primera vez en 87 años a los azulgrana en el balance histórico de los clásicos, que a fecha de hoy registra 95 victorias por bando y 51 empates. El líder no tiene cita con la Champions la semana que viene y las buenas noticias se le multiplican. Luis Suárez se convirtió el miércoles en el futbolista que menos partidos ha precisado (trece) para alcanzar once dianas en los clásicos, se aseguró el jueves la continuidad de Jordi Alba hasta 2024 y su cómodo colchón de puntos permite al Txigurri dosificar esfuerzos tras las exigentes citas frente al Olympique de Lyon, el Sevilla y el mismo Real Madrid.

Lenglet podría mantener su puesto en el eje de la retaguardia aunque Umtiti oposita al once para coger rodaje. Mejores cartas tiene Arthur, que reemplazará a Sergi Roberto en la medular con el objetivo de dotar al Barça del juego que no tuvo el miércoles, lo que permitirá a Rakitic oficiar de volante por la derecha con la misión de auxiliar a Semedo frente a Vinicius, el chico de moda al que se aferran los blancos aún más que el Barça a Messi.

Sin necesidad de exigirse demasiado, el Barcelona dio un

Suficiente con todo para el líder, que descuenta una jornada más del calendario sabiendo definitivamente noqueado a su enconado adversario y con la seguridad de que como mínimo mantendrá la renta de siete puntos con el Atlético. Desnivelaron además los azulgrana el balance de los clásicos,

Subsistía la duda de si Solari haría la alineación con un ojo en el Ajax o dispondría toda la artillería también contra el Barça, aun elevando el ya de por sí disparado kilometraje de su guardia pretoriana. Un clásico es un clásico, con todo lo que eso conlleva, resolvió el argentino, que sólo reservó a Lucas Vázquez para dar una

Salió contemporizador esta vez el Real Madrid. Pesaba en el ánimo de los locales lo sucedido en la vuelta de Copa, donde sucumbieron tras irse con todo a por la victoria. Tomó nota también el Barça de lo ocurrido el miércoles. Ya avisó Valverde de que tenían cosas que mejorar como lo suelto que estuvo Vinicius.

Al rosarino se le veía enchufado. Pésima noticia para el Madrid, que contuvo la respiración mientras

Ni siquiera tuvo que meter una marcha más. Le bastó con

Lo del Madrid no era sólo un problema futbolístico.

Sólo lo ajustado del marcador daba un hilo de vida al anfitrión, que se marchó a vestuarios con los ánimos muy calientes tras

Tuvo que haber rapapolvo en el intermedio, del que salió el Madrid con un corrillo para elevar líneas, pero la sensación era la misma. Los blancos estaban como un flan. Dos errores de Carvajal, desorientadísimo, pudieron dejar muerto el choque.