Vinicius eleva al Real Madrid camino de las semifinales de Champions

Aunque también ha resurgido, el conjunto 'red' está firmando una temporada discreta y también tiene bajas importantes, como la de Virgil van Dijk, uno de sus tres centrales titulales ausentes por lesión en este doble duelo, y la de su también capitán Jordan Henderson, que deja lastrado a un equipo que no puede revalidar el título de la Premier y, mientras como sexto clasificado lucha por la clasificación para la Champions, ansía tomarse la revancha contra su verdugo en Kiev (3-1). «Solo hace dos años que nos enfrentamos a ellos y fue una noche dura para nosotros, así que tener la oportunidad de volver a enfrentarnos es genial», se congratula Jürgen Klopp, con tantas ganas de vengarse del Real Madrid como las que puede tener Mohamed Salah, después de que el egipcio fuese apartado pronto de la final de hace tres años por Sergio Ramos.

Ante la batalla entre dos de los equipos más laureados del continente, que acumulan 19 entorchados, después de que el Liverpool sumase el sexto antes de ser despedido la temporada anterior por el Atlético en octavos, en un momento del curso tan trascendental para los blancos y para su propio futuro, Zinedine Zidane quiso reivindicar a este equipo resucitado y preparado ya para pelear incluso por un doblete que hace tres meses era una auténtica utopía. «Creo que se ha infravalorado a este equipo antes de tiempo. Hay que respetar. Yo confío mucho en mi equipo y sé lo que puede dar. Este equipo da la vuelta a todo lo que se puede decir desde fuera. Es lo bueno de este equipo y de su historia», proclamó este lunes con orgullo el técnico francés, para quien el duelo de este martes «es una final a 180 minutos o más contra un equipo completo». «Alguno destacará a sus tres delanteros (Salah, Diogo Jota y Mané), que son muy buenos y tienen una efectividad importante, pero yo apuntaría más el equipo que tiene, muy fuerte y muy sólido», comentó Zidane, que augura «un partido muy duro y muy difícil».

Pese al enorme potencial físico de los ingleses y la amenaza que representa este Liverpool que se ha reencontrado con el juego y los resultados tras el regreso de Diogo Jota después de estar más de dos meses lesionado, Zidane y sus jugadores se agarran a su experiencia, a su carácter competitivo, al espaldarazo anímico que supone volver a ser aspirantes al título de Liga, gracias a once partidos sin conocer la derrota (con nueve victorias), y a Karim Benzema. A falta de Cristiano Ronaldo, el francés lleva ya siete encuentros consecutivos marcando, superando su mejor racha goleadora. Él fue quien abrió el marcador en la capital ucraniana antes del doblete de Gareth Bale que decidió el título y le endosó tres de cuatro goles al Liverpool en la fase de grupos en 2014. Benzema vuelve a estar pletórico y a erigirse en la punta fundamental de un equipo que también disfruta de su talento pero echa en falta más tantos de sus compañeros. «Hay mucha química con Karim y se refleja en el campo», subraya Zidane, que no arriesgará con Eden Hazard para tan exigente primer asalto europeo pero sí sorprendió al incluir este lunes a Fede Valverde en la convocatoria.

Con el centrocampista uruguayo aún no recuperado completamente de su lesión, el entrenador madridista lamenta las ausencias del belga, de Sergio Ramos y de Carvajal, aunque insiste en que «la fuerza del Real Madrid está en el equipo». También echará muy en falta el único superviviente español reencontrarse con el Bernabéu y, sobre todo, a su afición, siempre tan intimidatoria en la Champions, pero el Liverpool tampoco contará con sus seguidores la próxima semana en Anfield, por lo que la balanza, en teoría, está igualada.

Liderado por fin por

El conjunto de Júrgen Klopp fue sobrepasado por los blancos durante una

Vinicius emergió en el gran partido del Real Madrid contra un Liverpool que en nada se parece al que perdió la final de la Copa de Europa de 2018 ante los blancos y se proclamó campeón un año después y que en Valdebebas sufrió un varapalo, que pudo ser aún mayor si el único superviviente español en la Champions hubiese tenido más pegada. Dominador y atrevido desde el pitido inicial, con el

No acusó el Real Madrid la baja del

Ante un equipo como el Real Madrid, y mucho más en la Champions, no se puede jugar sin ritmo ni fiarlo todo a la vuelta en tu campo, porque cuando el Liverpool quiso reaccionar en el segundo tiempo ya se había llevado un repaso de consideración por parte de los blancos. Con una superioridad insultante del Real Madrid reflejada en el juego y en el marcador, con el conjunto de Zidane llevando siempre la iniciativa y los ingleses lastrados sin fútbol en el medio campo, porque Klopp apostó por el