Ortigosa se moviliza a favor del viaducto San Martín

Arregle ya el puente, presidenta (bis)

Estimada Presidenta:

Hace unos días me dirigí a usted con la misiva «Arregle ya el puente, presidenta» a través del Diario La Rioja para contarle la situación de extrema gravedad que sufre el puente de Ortigosa. Ahora le hago entrega de las más de 2000 firmas que hemos conseguido recabar en solo 6 días. Valore el hito que supone para un pueblo como el nuestro, con 220 habitantes censados, semejante movilización.

Le escribo como miembro de la plataforma «SALVEMOS EL PUENTE DE ORTIGOSA». Somos 253 ciudadanos en el grupo de whatsapp, incluyendo a los 53 de la colonia riojana en Chile. Hemos conseguido pasar de no aparecer en el mapa a estar en la agenda mediática riojana, incluso los medios nacionales han puesto su foco de interés en nosotros. Y, lo que tiene aún más merito, lo hemos conseguido estando perimetralmente confinados. Ortigosa y los ortigosanos hemos sufrido una transformación en estos días. Se ha logrado una unión de la que no gozábamos antes.

Soy consciente, presidenta, de que se ha encontrado con este problema, y que lo ha heredado del ejecutivo anterior. Y el anterior del anterior. Y el anterior del anterior. Y así hasta llegar a los años 80. Y ha tenido la mala suerte de que la patata caliente le acaba de explotar a usted. El puente, lamentándolo mucho, no puede esperar más cambios gubernamentales, ni depositar la esperanza en promesas políticas que a la postre han resultado vacías en ejecución. Entienda, presidenta, que a los ortigosanos nos da igual el color del gobierno. Nosotros somos gente directa. De sí o no. De blanco o negro. No tenemos costumbre de dedicarnos al arte del «politiqueo». De igual manera, somos incapaces de andarnos por las ramas, de mover hilos aquí y allá o de dorar la píldora a los que tienen que tomar decisiones. No nos sale. Y, además, somos gente un poco huraña y desconfiada. No nos sirven las promesas políticas, como tampoco las ruedas de prensa, las fotografías en periódicos o las declaraciones de buenas intenciones. Necesitamos hechos: un convenio de subvención -que no financiación- firmado, que obligue a las partes, con nombres y apellidos, con fechas de inicio y fin, que afronte contratiempos o sobrecostes. Entiéndalo, presidenta, el clima forja el carácter, y la vida en la sierra pasa demasiado lenta, pausada. A veces tenemos la sensación de que solo vivimos y sentimos desde bien entrada la primavera hasta el 31 de agosto. El resto del año es una cuenta atrás esperando de nuevo a que pase el invierno y resurja el pueblo como lo hacen las flores en primavera. Y como pueblo unido, luchando por una causa justa, he de contarle con total sinceridad cuáles son nuestros objetivos: ver reparado nuestro puente y que Ortigosa no vuelva a caer en el olvido.

Quiero que entienda, presidenta, que el ortigosano cuando lucha, lo hace hasta el final. Recordará que hace dos décadas otros políticos, con las mismas responsabilidades que las que usted ostenta, tuvieron la brillante idea -nótese la ironía- de eliminar el primer ciclo de la ESO en Ortigosa. Pretendían separarnos de nuestros padres y enviarnos internos con 12 años, de lunes a viernes, al IES La Laboral. Imagínese usted, que es madre, la situación. Entonces profesores, alumnos, padres, etc. involucramos a mucha gente en nuestra lucha. Yo puede estudiar el primer ciclo de la ESO en Ortigosa, y todos los que vinieron detrás también. Y en la actualidad, ese derecho renovado hace más de dos décadas, sigue estando vigente. Tuvimos tan claro entonces como lo tenemos ahora que no luchamos por nosotros, lo hacemos para que las generaciones venideras tengan futuro.

Le pido, presidenta, que olvide el 1,5% cultural, todos sabemos que obtenerlo es una quimera y que el puente no puede esperar. Y le pido también que revise la propuesta de que su gobierno financie el 90% del presupuesto de la obra y Ortigosa el 10% restante. Ustedes han dejado claro lo buena que

sería esa opción: triplica el presupuesto al que tendríamos acceso los tres próximos años, a cambio de renunciar a las subvenciones que estaríamos en condiciones de recibir en el mismo periodo. Sin embargo, ustedes no explican a los ciudadanos las consecuencias que su ocurrencia va a tener para Ortigosa: ni una sola obra en seis años. Y son seis años y no tres porque el Ejecutivo que le precede ya nos impuso la misma condena cuando instalaron la luz de Iberdrola. No cometa el mismo error que sus antecesores. El pueblo no puede instalarse en un ostracismo sin fecha de caducidad.

Por todo ello, le pido, presidenta, que reflexione y haga reflexionar a su equipo. Arreglar el puente de hormigón no es un capricho, ni una mejora, es una urgencia a la que hay que dar una respuesta contundente. Los problemas de La Rioja vaciada no son ni de lejos los mismos que asumen en otros municipios riojanos. De la resolución o no de los mismos depende la supervivencia de nuestros pueblos. Y Ortigosa lleva décadas luchando para no dejar de existir.

María Malo García

Plataforma Salvemos el Puente de Ortigosa

14.02.2021