El Pleno ha despedido a quien fuese concejal durante 20 años, a su presidente desde 2011 a 2015, a uno de los suyos en definitiva. Y, con ello, el Ayuntamiento de Logroño ha dado su adiós desde la oficialidad a «toda una institución y un referente», en palabras de la actual presidenta, Leonor González Menorca. Un sentido y emotivo homenaje a Rodolfo Rubio, conocido popularmente como Fito.
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Rodolfo Rubio Martínez (Logroño, 1949) falleció ayer de manera repentina y, coincidiendo con la celebración de la sesión plenaria correspondiente a agosto, la actual Corporación ha tenido un recuerdo para quien «se ganó el respeto de todos» dentro y fuera de la política.
Así, a las palabras del alcalde y de los portavoces de todos los grupos municipales le ha seguido un minuto de silencio en su memoria culminado por un aplauso en el edificio de Moneo. Con la presencia de compañeros de partido y de club (el Berceo), exediles que compartieron mandatos, representantes vecinales e incluso sindicales.
Minuto de silencio en memoria de Rubio, al comienzo de la sesión plenaria.
SULEYMAN EVRAN
Veterano miembro del Partido Popular, amante del deporte y de los toros, la vida pública de Rubio se repartió entre dos instituciones muy importantes en la ciudad: el Ayuntamiento de Logroño, de cuya Corporación formó parte desde 1995 a 2015, y el Club Deportivo Berceo, del que llegó a ser presidente. De ello se han acordado todos.
«San Bernabé tendrá un nuevo compañero para ayudarnos a los logroñeses desde el cielo», ha dicho Conrado Escobar, quien ha destacado que Fito manejaba «el idioma más universal: el del corazón». «Con él se va una escuela, una forma de servir...», ha añadido para dejar claro que era «compendio de lo que es un logroñés»... «polifacético y políglota a su manera».
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«Un gran servidor público» para Rubén Antoñanzas (PR+E); «un gran amante de su ciudad y, por tanto, siempre pendiente de lo que pasaba en ella» para Amaia Castro (Podemos-IU); «un gran amigo, persona y compañero» para Patricia González Lacarra (Vox); «un gran ejemplo por su manera de ser y de estar» para Pablo Hermoso de Mendoza (PSOE); y «maestro por su cercanía, empatía y capacidad de sumar» para Miguel Sáinz (PP). Servicio público en esencia, por unanimidad.
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