A dieta
«No tomo nada sólido, aunque tenga hambre. A veces, un té sin azúcar».
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Viernes, 28 de Marzo 2025, 11:22h
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XLSemanal. Hay en su libro sexo a discreción: hace veinte años encabezaría la colección de La Sonrisa Vertical...
Ildefonso Falcones. Es probable, aunque el sexo está siempre escondido tras un puritanismo absurdo porque asumimos todo tipo de violencia, pero tapamos de una forma ridícula el sexo.
XL. ¿Pretende hacernos creer que, en el siglo XV, mandaban las mujeres, perfectas manipuladoras que mecían cada cuna?
I.F. ¡Siempre ha sido así! [Ríe]. Aun en estado de sumisión, en el ámbito privado, nunca renunciaron a intervenir en la vida pública de forma trasera.
XL. Cuenta que una amante virgen manejaba a su antojo al rey Alfonso V.
I.F. Y alardeaba, además, de manejarlo. Los poetas le cantaban a esa virginidad que el propio rey no negaba. En la corte, las mujeres siempre han jugado con los hombres.
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XL. ¡Por Dios! Pero si las violaban en los saqueos y luego eran repudiadas por ello.
I.F. Alfonso V prohibió las violaciones, aunque no su hijo Ferrante. El último duque de Calabria, que sí entraba a saco, secuestraba a las mujeres y las violaba después.
XL. Reconozca que, de no ser noble o no caerle en gracia al rey, lo mejor que se podía ser en esa época era perro de caza... [Risas].
I.F. Sí, sí, la caza era la gran afición de reyes y grandes. A los perros los enfrentaban a los jabalíes, pero los cuidaban mucho y se hacían misas por ellos para recuperarlos si se perdían.
XL. Seis siglos después sigue habiendo violaciones en manada, contrabando, corrupción, genocidios y guerras, aunque con sofisticadas armas, drones, IA…
I.F. La diferencia radica en nuestra percepción. Antes, la sociedad permitía la esclavitud, la sumisión, la violación… Hoy, creo, la sociedad no lo admite, pero no ponemos los medios necesarios para que termine.
XL. Sí los ponemos, pero en democracia…
I.F. [Interrumpiendo]. Creo que la democracia se ha autodestruido. El voto legitima a un señor que luego hace con el poder lo que quiere, con unos intereses generalmente espurios. Democracia es respeto, y votar se ha convertido en una manera perversa de legitimar a unos señores que después nos machacan sin cumplir lo prometido.
XL. ¿Está deprimido?
I.F. Políticamente he entrado en depresión, sí, y confío en que no me afecte a mi espíritu como persona.
XL. ¿Una pista sobre su próxima novela?
I.F. No he dado ninguna hasta ahora, pero a ti te diré una cosa: será novela histórica y se desarrollará en España.
«No tomo nada sólido, aunque tenga hambre. A veces, un té sin azúcar».