Secciones
Servicios
Destacamos
La pandemia conllevó la utilización intensiva de las nuevas tecnologías: hasta los usuarios menos duchos experimentaron con las videollamadas, el trabajo remoto y las aplicaciones de citas. Para muchos, estas últimas ayudaron a mitigar la soledad durante las semanas más duras del confinamiento, cuando se ... acrecentó la necesidad de conectar con otros. Sí, puede que los encuentros cara a cara no fuesen posibles (al menos sobre el papel), pero disponíamos de todo el tiempo del mundo para conocer a un posible amor intercambiando mensajes sobre nuesta vida, gustos y aspiraciones.
En este conexto, los ciberdelincuentes descubrieron el caldo de cultivo perfecto para perpetrar sus estafas. Raro es el día en que no trasciende a los medios el testimonio de algún corazón roto; personas que se enamoraron de un perfil fraudulento y no cayeron en el engaño hasta haber enviado importantes sumas de dinero a su interlocutor (quien desapareció poco después de confirmarse la transacción, por supuesto).
También se han dado casos de interacciones reales tras un primer contacto en la app de turno, como tapadera para hacer más creíble el engaño. Uno de los más sonados se abordó en el documental de Netflix 'El timador de Tinder', en torno a la figura de Shimon Yehuda Hayut. Con todo un pasado delicitivo a sus espaldas, este israelí decidió hacerse pasar por multimillonario en las redes de contactos.
Bajo el seudónimo de Simon Leviev (supuestamente emparentado con Lev Leviev, magnate de la industria de los diamantes), el estafador organizaba lujosas primeras citas en las que engatusaba a sus víctimas. Varios viajes en jet privado y cenas de postín más tarde (todo pagado con dinero estafado previamente), éstas terminaban confiando en él y accedían a proporcionarle ayuda económica al convencerlas de que su vida corría peligro. Para ello grababa vídeos simulando intrusiones violentas en su domicilio o estancias hospitalarias fruto de hipotéticas agresiones, lo que preocupaba a unas amantes con las que había llegado a trazar una vida en común. Cuando descubrían que todo había sido una mentira, ya era demasiado tarde: se encontraban atadas de manos y con varios préstamos bancarios a los que hacer frente.
Recientemente, la Secretaría de Seguridad Pública de São Paulo (Brasil) informó que más del 90% de los secuestros registrados en la ciudad tiene su origen en relaciones trazadas por medio de aplicaciones de citas. Solo en 2022, la Policía Civil esclareció 94 hechos de este tipo y arrestó a 251 sospechosos. Los cacos monitorizan a aquellos usuarios que aparentan cierto poder económico para posteriormente asaltarlos en calles poco transitadas, justo después de haberlos citado. Las víctimas suelen ser hombres de entre 30 y 65 años, muchos de los cuales acaban transfiriendo dinero a los delincuentes a través de PIX, un sistema de pagos mediante códigos QR tremendamente popular (lo utilizan 7 de cada 10 de brasileños).
En España supimos hace unos días de 'Activo XL', el seudónimo empleado por una banda criminal llegada a España para drogar y robar a hombres a través de Grindr, una aplicación habitual en la búsqueda de relaciones homosexuales. Tras varios asaltos en los madrileños distritos de Hortaleza, Salamanca, Retiro, Carabanchel y Usera, la policía ató cabos y encontró a los responsables alojados en un piso turístico. Utilizaban fotos tanto reales como ficticias para atraer a sus víctimas y, una vez en sus domicilios, las dormían deslizando somníferos en la bebida (solían presentarse con cervezas). En ese momento aprovechaban para hacerse con dispositivos electrónicos y tarjetas de crédito.
Miguel Rego, Director del Área de Ciberseguridad en IMMUNE Technology Institute, apunta a otros modus operandi criminales a través de aplicaciones como las mentadas: «Algunos delincuentes covencen a la víctima para que envíe videos o fotos de contenido sexual y, a continuación, la extorsionan bajo amenaza de divulgarlos públicamente. En otras ocasiones les inducen a actuar de muleros para blanquear su dinero negro».
Cabe preguntarse entonces qué señales deberían ponernos en alerta al ligar a través del teléfono móvil. Para Rego «es necesario que analicemos el perfil y veamos si nuestro contacto tiene muy pocas fotos, si muestran un glamour excesivo o parecen haber sido sacadas del 'book' de un modelo profesional. En ocasiones el contacto es de fuera, pero se muestra muy interesado en entablar relaciones con personas de nuestro país. También debemos sospechar si desde las primeras conversaciones nos pide que nos movamos a alguna forma de mensajería fuera de la plataforma en la que nos hemos conocido. Con este movimiento tratan de conseguir más información sobre nosotros, como el número de teléfono o la dirección de correo electrónico».
«Otro dato significativo -prosigue el experto- es que siempre que tratemos de cerrar un encuentro presencial, habrá algún problema de última hora que hará que la cita no pueda llevarse a cabo. Por supuesto, no tardarán en salir en las conversaciones temas relacionados con el dinero. Usualmente la petición de alguna ayuda económica ligada a situaciones personales desfavorables».
El director de IMMUNE Technology Institute recomienda ser más listos que cualquier falso interlocutor aplicando sus mismas estrategias: «Siempre podemos intentar realizar una búsqueda inversa tratando de identificar en otros foros información sobre la persona con la que estamos contactando. También es muy importante tratar de identificar si la foto de nuestro perfil se está utilizando en perfiles asociados con personas diferentes. Aunque la lista de herramientas que podemos utilizar es muy numerosa, algunas de las aplicaciones que nos podrán ayudar a realizar esta búsqueda son: TinEye, UserSearch, Reverse Image Search, BeenVerified o PeopleLooker».
Por lógica, también nos abstendremos de compartir «demasiada información personal y contenido multimedia donde aparezcamos en situaciones comprometidas», consejos éstos refrendados por el Centro de Seguridad de Tinder. La aplicación recomienda por último «no quedar en persona en la primera cita y utilizar el videochat para comprobar si el otro es quien dice ser».
El videochat constituye sólo una de las funcionalidades que los ingenieros de Tinder han implementado para mitigar los riesgos de interactuar con desconocidos. Quizás la más efectiva sea la 'verificación de foto': compara las fotos de perfil subidas por el usuario con otras tomadas in situ desde la aplicación, de forma que se dificulte la creación de perfiles falsos. Los usuarios también cuentan con opciones para denunciar conversaciones y mensajes inapropiados sin salir del chat en curso; pueden bloquear a contactos para que no aparezcan como un posible match y reciben alertas si abren la app en países que atenten contra los derechos LGBTQ+ (de cara a salvaguardar su integridad). Tinder cuenta igualmente con un gabinete de apoyo a las víctimas de acoso gestionado en colaboración con RAINN, una de las organizaciones no gubernamentales líderes en la lucha contra la violencia sexual.
Con todo, Rego señala la conveniencia de que las plataformas de contactos actúen de forma proactiva contra los perfiles de usuarios no verificados: «Un software de detección automatizado es capaz de marcar tanto los rasgos más externos del perfil (localización geográfica, características de la foto, información descriptiva) como su información no visible (las direcciones IP o dominios desde donde se ha producido la conexión). Posteriormente, aquellas cuentas identificadas como potencialmente sospechosas deberían ser escrutadas por un analista mediante otro tipo de herramientas. Estos trabajos son muy similares a servicios típicamente utilizados en ciberseguridad, como la vigilancia digital, que analiza información relativa a personas u organizaciones para realizar un seguimiento de su actividad».
Si algo queda claro es que el sentido común será nuestro mejor aliado al intentar encontrar a nuestra media naranja por la vía digital. En caso de problemas, al menos tenemos el consuelo de que las plataformas más utilizadas cuentan con mecanismos de denuncia y que las propias Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado andan cada vez más alerta frente a estos 'delincuentes del amor'.
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Carnero a Puente: «Antes atascaba Valladolid y ahora retrasa trenes y pierde vuelos»
El Norte de Castilla
Publicidad
Publicidad
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.