¿Cómo saber si nos hemos intoxicado con setas?

La segunda causa de que las intoxicaciones vayan a más es el cambio climático: varían los hábitats y, con ellos, las clases de setas que crecen en él, creando aún más confusión entre los seteros (una 'especie' que también va al alza, con muchos advenedizos despistados). Así lo explica el doctor Salvador Ventura, miembro de la Comisión de Monitorización de Fármacos y Toxicología Clínica de laSociedad Española de Medicina de Laboratorio (SEQC-ML), quien reitera que, ahora más que nunca, hay que seguir el mantra de todo buen aficionado a la micología: «¡Coger solo lo que se conoce bien!».

Según recalca, cada vez es más fácil cometer errores y acabar comiendo alguna especie 'mala', generalmente en compañía, para más inri. «En el 80% de los casos las intoxicaciones de setas (médicamente conocidas como micetismos) son colectivas», añade Ventura.

Estos cuadros pueden llegar a ser mortales, por lo que su diagnóstico precoz y una rápida actuación son claves.Los peores envenenamientos tienen una pavorosa tasa de mortalidad del 50%, aunque si se acude rápido a un centro sanitario este porcentaje se reduce al 10%. Aunque lo de la velocidad... no siempre ocurre. A veces, los afectados esperan demasiado antes de ir al médico o, simplemente, no lo hacen (la mitad de los intoxicados no pasan por el hospital). Y los facultativos... a veces tardan en acertar con el diagnóstico y el tratamiento, ya que las setas tóxicas causan una treintena de síndromes diferentes y algunos de ellos empiezan a manifestarse muchos días después de comerlas.

«Las intoxicaciones por setas es un capítulo pendiente en todos los servicios de Urgencias», indica Ventura, uno de los responsables de una monografía –'Micetismos: diagnóstico clínico y de laboratorio'– para ayudar a los médicos y profesionales de laboratorio a identificar rápido un micetismo. Yla gente de a pie, ¿cómo puede darse cuenta de que se ha envenenado con setas? (a veces puede haber síntomas tardíos o inesperados). El experto ofrece unas claves según el tiempo que haya pasado desde la ingesta.

Muchas intoxicaciones son de inicio temprano, llamadas así cuando los síntomas aparecen en las tres horas posteriores a haber comido las setas. Un síndrome colinérgico, por ejemplo, que causa, entre otras alteraciones, lagrimeo, secreciones nasales, sudoración y dolor abdominal puede desencadenarse un cuarto de hora después de comer el ejemplar 'malo'. Además, hay otros síndromes que provocan visión borrosa o alucinaciones que aparecen también enseguida, como los vómitos repentinos o la diarrea. En el caso de síntomas digestivos, posiblemente el cuadro se quede ahí (la mitad de las intoxicaciones tratadas son simples alteraciones digestivas), pero si la especie causante es de las verdaderamente peligrosas hay que evitar que el envenenamiento siga su curso y dañe órganos como el hígado o el riñón.Al médico corriendo.

Hay micetismos cuyos síntomas aparecen entre media hora y tres horas después y que causan un síndrome neurológico central con alucinaciones visuales, euforia, taquicardias (en niños, convulsiones). Ocurre si comes Amanita muscaria, Amanita pantherina y Amanita gemmata, por ejemplo.

Las intoxicaciones que se visibilizan más tarde suelen ser las más graves y suelen estar ligadas al síndrome hepatotóxico –responsable del 90% de las muertes por setas, reducible al 10% si se actúa rapido–, es decir, daños en el hígado. ¿Las culpables habituales? Amanita phalloides, Amanita verna, Amanita virosa, Galerina marginata, Lepiota brunneoincarnata... El fallo renal también aparece en este periodo de tiempo.

Parece raro. Igual ya ni nos acordamos de que hemos comido setas... pero empezamos a encontrarnos mal y sí, son las setas. Algunas especies como la Tricholoma ecuestre causan dolores musculares y fatiga dos o tres días después de haber sido ingeridas. Y casi 20 días después, ¿podemos empezar a notar que algo no va bien? Sí. Náuseas, diarrea, dolor abdominal, sabor metálico, ardor en labios y lengua... Setas Cortinarius orellanes, Cortinarius speciosissimus, por ejemplo, pueden ser de efecto muy retardado.