PPLL
Domingo, 10 de julio 2011, 02:55
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Seguro que más de un padre y de una madre tendrá que comprar mañana mismo un tarro de miel. Así se lo reclamará su infante, convencido de que la miel, además de dulce, es sana y un producto de lo más curioso que les permitió divertirse en una actividad diferente ayer por la mañana. Fue el taller para los más pequeños incluido en el programa de actos de esta I Feria de Artesanía Agroalimentaria.
Un artesano experto apicultor explicó a los niños las propiedades de la miel, les invitó a probarla, dibujaron abejas en diversas posturas y conocieron de cerca las diferencias que existen entre la abeja reina, el zángano y la abeja obrera. Pudieron probarse el traje típico del buen apicultor y observaron con especial atención la organización tan maravillosa del panal de miel. Conocieron plantas, observaron cómo se extrae este producto, hicieron velas y recibieron una pequeña charla sobre la miel como concepto de vida saludable.
Esta experiencia no fue la única. Los visitantes que así lo quisieron pudieron participar, previa inscripción, en una cata de turrones artesanales. Los participantes conocieron de cerca el interesante mundo del turrón. Y para todos, la organización elaboró una degustación de productos típicos riojanos más que maravilloso a esas horas de la mañana.
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