Borrar
TVR

Una vida en la Antártida

Javier Martínez y Encarnación Núñez, investigadores de la Universidad de La Rioja, estudian la adaptación de plantas a condiciones extremas con la mirada puesta en el avance del cambio climático

TVR

Logroño

Jueves, 3 de marzo 2022, 20:48

La voz de dos riojanos llegaba a TVR este jueves desde la Antártida. Allí se encuentran los investigadores, los dos catedráticos Javier Martínez y Encarnación Núñez. El interés de su estudio es averiguar cómo los musgos y otras plantas logran sobrevivir en condiciones tan extremas.

Desde la Base Juan Carlos I explican que «están bastante atareados, hay muchas cosas que hacer y en poco tiempo». «Solo hay dos plantas con flores, una es pariente de los cereales y otra de los claveles», asegura Javier, «lo que más abunda son los líquenes, unas 300 especies, y muchos, unas 120». Aquí hay poca agua líquida, recuerda, además de otras duras condiciones como el incremento de la radiación ultravioleta.

El día a día de estos investigadores del grupo ECOPHYS de la Universidad de La Rioja es muy ordenado. «Hay una hora fija para el desayuno, a las ocho en punto», dice en el momento de describir una de sus jornadas Encarnación Núñez. «A partir de ahí salimos a muestrear, a las 14 horas comemos y por la tarde vamos al laboratorio a hacer los análisis de las plantas que hemos recolectado», detalla. Esta recogida de muestras la realizan cerca de la base, también pasando el canal donde van en zodiac y en el pico Sofía, donde apunta Encarnación que hay bastante diversidad. «Tenemos un cocinero y un pinche de cocina, pero cada día cuatro de nosotros ayudamos», afirma. «Hemos tenido algún problema de abastecimiento y unos compañeros búlgaros nos han dado», recuerda con una sonrisa de cariño.

«Uno de los objetivos es entender el ecosistema antártico y el otro es intentar encontrar plantas que toleren estos factores adversos pero que tengan unas tasas de fotosíntesis y de crecimiento relativamente altas. Se las conoce como superplantas y si las encontráramos alguna de esa especie aquí intentaríamos hallar los mecanismos moleculares que subyacen a esta capacidad para aplicarlos a plantas cultivables», explica Javier. «El objetivo último es adaptar los cultivos al cambio climático», añade Encarnación.

El día 20 volverán a La Rioja y es que una parte tienen ganas de regresar, así lo expresan, pero por otra les queda «mucho por hacer», insisten. Y es que la experiencia es única. «Preferimos terminar el trabajo y luego volver, para eso hemos venido», concluye ella.

Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios

larioja Una vida en la Antártida