Garzón defiende el modelo Rioja tras el ataque del PNV

El ministro de Consumo, Alberto Garzón, ha defendido este viernes en Logroño el modelo Rioja, después de que el PNV presentara en el Congreso y después, ante la falta de apoyos, retirara la proposición para crear un DO propia y autogestionada en Rioja Alavesa.

Rojano de nacimiento, ha señalado «que es una materia que conozco de sobra por razones de nacimiento y de familia, así como de preocupación ciudadana». En este sentido, cree que el problema «no es territorial, sino regulatorio».

Como Gobierno, pero también como coordinador de IU, defiende que la fórmula actual «ha permitido productos de alta calidad, reconocidos internacionalmente, por tanto, siempre nos hemos mantenido en la defensa de este modelo y el sentido común apunta en este sentido».

La clave de éxito, a su juicio, reside en la fórmula de aunar a varios territorios «en torno a unos criterios, a una regulación, que es positiva, buena y que particularmente para La Rioja es necesaria». Por tanto, la posición de IU «no ha variado en absoluto, ni variará», ha insistido.

Alberto Garzón ha hecho estas declaraciones en la Delegación del Gobierno en La Rioja, después de reunirse con ARJA (Asociación Riojana de Jugadores de Azar en Rehabilitación).

En rueda de prensa, junto a la delegada María Marrodán, Garzón ha avanzado que trabaja para que exista una coordinación entre comunidades para lograr un registro de autoprohibidos de los juegos de apuestas, de modo que mejore su eficacia y una persona que se incluya en él no pueda entrar en un salón de juegos de ninguna región.

Ha recordado que desde el pasado 1 de septiembre está prohibida la publicidad del juego, un gran avance porque, según los últimos estudios citados por el ministros, «la afectación de los juegos de azar y casas de apuestas no es solo de salud individual sino también de rendimiento educativo».

En cuanto a la regulación sobre esta cuestión que están haciendo las comunidades, reconoce que hay cierta «asimetría». Así, por ejemplo, en Valencia o Baleares se habla de una distancia entre el centro educativo y los salones de juego de 500 metros de colegios o institutos o en Andalucía de 150 metros y en La Rioja de 250 metros, «creo que hay una conciencia ciudadana creciente que se está visualizando en una mayor regulación pero según vamos teniendo más información, como estos estudios, es más importante que seamos más audaces».

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