Bañares, con ilusión para afrontar el reto demográfico

«Bañares tiene muchos recursos». Así lo asegura Antonio Ortil, el alcalde, que entre ellos nombra el patrimonio cultural. Fidel Ortiz, guía de la iglesia, apunta que es «una construcción del Gótico de los Reyes Católicos y que espectacular el retablo de 1756 aproximadamente». «El anterior se volcó y solo se pudieron salvar tres figuras», detalla. «Lo original que tiene es que se talló en pino», explica para las cámaras de TVR ante las que habla también sobre el coro de influencia francesa y que tiene «1.131 tubos y está considerado entre los de La Rioja como uno de los mejores».

«También hay aquí patrimonio paisajístico, patrimonio desde un punto de vista que el clima, el agua, la tierra y agua permite producir todo lo que se quiere y que Bañares siempre ha sido un pueblo emprendedor y el conocimiento y esta actitud de la gente del lugar con el desarrollo de Bañares con los tiempos que vivimos. Ha habido un cambio importante porque había perdido Bañares su imagen de identidad por unos acontecimientos anteriores y en los últimos diez años ha habido un colectivo de vecinos, un colectivo de mujeres maravilloso con su implicación y saber hacer y hemos conseguido dinamizar el pueblo y que la ciudadanía se vuelque en la búsqueda de lograr un pueblo de oportunidades y con el reto demográfico y los fondos europeos tenemos una ilusión por aprovechar esta oportunidad que vivimos históricamente», detalla el edil.

«Hemos hecho un diagnóstico que actualizamos de forma permanente para decidir cuáles son las potencialidades y cuáles las debilidades partiendo de lo que es mejorar los servicios en Bañares, la calidad la vida y crear las condiciones para lo que es un envejecimiento activo, la realización y las necesidades para que jóvenes puedan desarrollar su proyecto vital aquí. Para esto hay que cambiar una serie de políticas y condiciones burocráticas, queremos impulsar que en esta nueva ruralidad queremos crear un foro en el que todos tenemos que decir, todos tenemos que consensuar para crear una sociedad nueva y donde el Ayuntamiento no solo tiene que cubrir cuestiones demográficas sino ser un centro de desarrollo donde la implicación y la participación de la gente es fundamental», explica.

Por su parte, María Amilburu, concejala de Festejos indica que este tiempo se ha vivido con «resignación» y «preocupación», dice en lo que se refiere a la pandemia, no poder celebrar las fiestas, pero «la salud de los vecinos era lo que primaba». «Este verano vamos a intentar a hacer un verano más cultural y tenemos la suerte de tener la iglesia donde controlar muy bien el aforo para conciertos», afirma. «Fiestas como tal no va a haber, nuestra prioridad es que no pase nada, qeu no pase lo que ya ocurrió el año pasado», señala. «Las asociaciones sí van a hacer algún acto, sin masificación, como alguna degustación, algún concurso...», termina.

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