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J. C. / L. R.
Martes, 1 de marzo 2022, 16:53
Vuelta a la normalidad «de forma paulatina». Los Bomberos de Logroño registraron un total de 1.446 intervenciones durante el pasado 2021, un 10,8% más respecto al año de la pandemia que refleja que la situación «se va pareciendo a la de antes del coronavirus».
La memoria del Parque de la capital de La Rioja, en cualquier caso, refleja más salvamentos y menos incendios, lo que encontraría su explicación en la todavía coyuntura de emergencia sanitaria (más tiempo en casa y menos actividad pese a la notable mejora), según las explicaciones de la propia jefatura.
La concejala de Convivencia, Eva Tobías Olarte, y el jefe de Bomberos, Alfredo Bazo, presentaron ayer el balance de actividades dando cuenta de que en 2021 hubo 141 intervenciones más que en 2020, «regresando poco a poco a cifras similares a las de 2019, aunque aún queda». Del total de intervenciones, 1.048 se produjeron en Logroño, 378 en el resto de La Rioja, 17 en localidades de Álava y 3 en municipios de Navarra.
Las cifras arrojan una media de 3,96 actuaciones al día, y del total de las mismas hasta 111 fueron falsas alarmas, 396 incendios, 778 salvamentos (desde aperturas de puerta a rescates en la propia vivienda), y 161 asistencias técnicas.
Entre las intervenciones más destacadas en incendios sobresalen las realizadas el 12 de enero en unas viviendas en Sojuela; la del 20 de abril en unas casetas en Villamediana de Iregua; otra el 30 de junio en el CAPDP Santa Lucía en Fuenmayor, que precisó de la evacuación completa del centro; o la deflagración de gas en el ático de un edificio de viviendas en Lardero en la que hubo dos heridos graves y que precisó del desalojo del vecindario hasta hoy, entre otras.
El jefe de Bomberos, Alfredo Bazo, ha destacado también algunos de los principales salvamentos realizados en el pasado ejercicio, «como la llevada a cabo durante la borrasca Filomena, la mayor tormenta de nieve en España desde 1971; o el derrumbe del forjado del salón de una vivienda en la calle Pilar Salarrullana, que afectó a todo el edificio, que debió ser desalojado y apuntalado, entre otros».
Respecto a las asistencias técnicas, la concejala y el jefe de Bomberos han señalado que hubo menos actuaciones preventivas como consecuencia de la cancelación de las fiestas de San Bernabé, San Mateo y otros eventos culturales y deportivos. Sin embargo, se reanudaron las actividades preventivas en la segunda mitad del año, con visitas de colegios e institutos, así como actividades de formación preventiva a empresas y otros colectivos.
Además, se elaboraron 106 informes de prevención en actividades de circos, carpas, eventos, actividades de dominio público, así como en reformas y actuaciones urbanísticas en espacios públicos y calles de la ciudad.
Tobías Olarte ha subrayado «el potencial y la calidad de la plantilla del Parque de Bomberos de Logroño, formada por 74 personas cuya edad media es de 46 años». También se ha referido al plan de formación interna y al plan de parque puesto en marcha tras el acuerdo para el periodo 2020-2027, que ha motivado la organización de diferentes acciones de interés en materia de prevención y maniobra, entre otras.
En este sentido, ha resaltado el «compromiso en materia formativa que tiene la plantilla». Durante este año se han consolidado acciones formativas enmarcadas en tres niveles: en el plan del parque, en formación obligatoria y en otros cursos más específicos.
El plan formativo del Parque de Bomberos de Logroño se realiza en función de una planificación semanal durante la jornada habitual, de mañana y tarde, siempre que la atención a posibles siniestros lo permita. Se repasan técnicas y protocolos de actuación, así como el manejo de vehículos, equipos y herramientas.
Además, el personal realiza 50 horas anuales por persona de formación obligatoria, fuera del turno de guardia, en áreas como la asistencia a víctimas en estado crítico, manejo de desfibriladores, intervenciones en edificios de viviendas, rescate en entornos naturales, rescate acuático y manejo de embarcaciones, trabajo en altura y trabajo con helicópteros.
Asimismo, en el pasado ejercicio también se llevaron a cabo otras acciones formativas más específicas, como la operativa en el nuevo vehículo de autoescala, prevención y manejo de maquinaria forestal en situaciones de emergencia, seguridad vial, intervenciones en grandes enjambres de abejas o avispas, así como otros cursos online de diversa índole.
La edil de Convivencia también ha puesto de relieve las nuevas adquisiciones y equipos como los trajes de rescate técnico para todo el operativo, trajes de intervención en fuego estructural, equipos de comunicación, un repetidor UHF, además de diferente material de trabajo y seguridad para rescate acuático y otras importantes que ahora mismo están en fase de ejecución, con cargo al presupuesto de 2021, como la compra de un nuevo vehículo ligero y una autobomba urbana pesada, ambos con una inversión de 440.000 euros.
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