Un informático contra el lenguaje: el día que la RAE cambió el significado de 'hacker'

La RAE ha modificado su definición de hacker para incluir, como segunda acepción, "la persona experta en el manejo de computadoras, que se ocupa de la seguridad de los sistemas y de desarrollar técnicas de mejora". Algo en lo que Chema Alonso lleva implicado desde 2014.

"Desde hace años llevo defendiendo la inclusión de una definición del término hacker diferente a la de pirata informático", nos explica. Ésta era la única acepción que la RAE incluía desde que decidió incorporar al diccionario en 2014. El pirata es un criminal, el hacker no.

–¿Por qué no gusta la acepción de 'pirata informático'?

–Criminaliza la importante labor que llevan a cabo los hackers, expertos investigadores que prueban las tecnologías sometiéndolas a continuos retos tecnológicos y que las llevan a alcanzar nuevos límites en los que sus creadores ni siquiera habían pensado.

Además, Alonso defiende que estos profesionales "mejoran la tecnología que utilizamos y su seguridad, algo muy bueno".

Por eso, insiste en que definir a un hacker como un pirata "iguala al primero con un cibercriminal", que es quien utiliza herramientas de terceros y técnicas como el 'phising' para engañar a sus víctimas y estafarles saltándose la legalidad y aprovechando los fallos de seguridad de las diferentes aplicaciones. "Y precisamente una de las labores que desempeñan los hackers es eso, detectar esos fallos y provocar así que sean corregidos por los propietarios de esas aplicaciones o tecnologías".

Quizá por eso, y porque los hackers protegen a los usuarios, Chema Alonso reconoce que, sin embargo, el cambio introducido "supone una buena noticia aunque me hubiese gustado un cambio mayor". En este sentido, para este experto lo ideal hubiera sido que la RAE eliminara por completo la acepción de "pirata informático". Pero, en cualquier caso, "valoro positivamente que hayan incluido una nueva acepción más ajustada a los cambios que propongo desde hace años, la del hacker "como un experto en el manejo de computadoras, que se ocupa de la seguridad de los sistemas y de desarrollar técnicas de mejora". Es una definición muy parecida a la que recogen ya desde hace años otros diccionarios de otras lenguas".

Cabe señalar que la RAE viene a incluir como definición de hacker la idea que estaba más extendida a nivel social en aquel entonces y que, además, era la que se incluía entonces en el Diccionario Panhispánico de Dudas. "Entonces comenzó mi particular cruzada para conseguir el cambio", rememora este experto. "Puse en marcha una campaña de recogida de firmas en Change.org para solicitar el cambio. En aquella petición defendía que efectivamente calificar al hacker como un "pirata informático" lo criminalizaba cuando en realidad lo que caracteriza a un hacker es su pasión por buscar los límites de las tecnologías y contribuir a su mejora".

Chema Alonso asegura que siempre que ha tenido ocasión ha denunciado "lo que yo consideraba era una definición injusta" por la mayor institución que vigila por el futuro de la lengua española. "Creo que algo he conseguido en este tiempo y que poco a poco ha comenzado a calar la definición que he venido defendiendo, también entre los medios. El hecho de que vosotros os hayáis hecho eco del cambio es una muy buena señal de que algo ha comenzado a cambiar", señala.

Y este experto también considera que quizá la RAE debería aceptar a alguien de su perfil como miembro para adaptar el uso del lenguaje a la tecnología. "El lenguaje se mueve muchísimo más despacio que la tecnología y es preciso incorporar nuevos términos tecnológicos de forma más rápida a nuestro diccionario. Entiendo la resistencia inicial a hacerlo porque en la práctica totalidad de los casos son palabras en inglés, un idioma creo yo mucho más dinámico que el español en lo que se refiere a su poder de adaptación al lenguaje que se utiliza a diario en la calle y en el trabajo. Lo ideal es que se diera con términos equivalentes en español, cosa que en muchos casos se hace, pero la realidad es que en un mundo tecnológico dominado por el inglés y con una ventana universal como es internet es muy difícil contrarrestar la influencia del inglés".

Reconoce que no es una tarea sencilla y son muchas las cosas a tener en cuenta y cree hay "muchas y muy buenas opciones, candidatos que dominan el lenguaje y que conocen y utilizan mucho la tecnología" para aspirar a este puesto.