Nokia da señales de vida con una tableta con Android

Las imágenes dejan ver que esta máquina tiene un parecido inapelable al iPad Mini. De esta forma destierra así el diseño de la gama Lumia que había sido su santo y seña en los últimos años, en una decisión que podría obedecer a un tema de patentes.

Su armazón hecho en aluminio recuerda y mucho al exterior del dispositivo de Apple, hasta en detalles como la posición de los altavoces y el conector de USB. La N1 cuenta con una pantalla de 7,9 pulgadas, con resolución de 2.048x1.536 pixeles. Su silueta tiene un grosor de 6,9 milímetros, pesa 319 gramos y cuenta con un procesador de cuatro núcleos a 2,4 gigaherzios de Intel será el encargado de moverla.

Este chip se jalona con una memoria RAM de 2GB y 32GB de memoria interna. En su interior guarda una batería de 5.300 mAh y sus cámaras -no han incluído flash alguno en ninguna de las caras de la tableta- cuentan con un sensor de ocho megapíxeles en el caso trasero y de cinco en el caso delantero. En ambos casos, pueden grabar vídeo Full HD a 1080p.

Precio asequible

Su lanzamiento está previsto para los primeros meses de 2015. El primer mercado donde estará disponible será China y posteriormente se irá expandiendo en otros países. El principal problema es que la venta a Microsoft incluía las plantas de producción por lo que Nokia debía encontrar un tercer actor que se ocupase de la fabricación en serie, una tarea que ha recaído en el gigante chino Foxxconn.

El precio rondará los 200 euros más impuestos, una cifra que no tiene otro objetivo que el de poder ofrecer una alternativa competitiva en un mercado -el de las tabletas Android- ampliamente dominado por Samsung pero, a partir del tercer puesto todo queda mucho más ajustado. Según Gartner, el último curso se saldó con el siguiente reparto: en primera posición, Apple con un 36%; en segunda posición, Samsung con un 19%; seguidas de Asus (5,6%), Amazon (4,8%) y Lenovo (3,3%).

Se trata del primer dispositivo de este fabricante que incorpora sin tapujos el sistema operativo móvil de Google. Y es que Nokia, cuando se iban quemando los trámites comerciales y administrativos para ultimar el traspaso a los de Redmond, llevó al pasado Mobile World Congress su serie X. Se trataba de una familia de tres terminales económicos que con una plataforma cuya base era Linux, el estrato medio era ASOP (lo que facilitaba la integración del OS móvil de Google) y cuya interfaz heredaba la mayoría de ingredientes del software de Microsoft, quien ha decidido sacarlos de su catálogo.

Aunque incorpora la Lollipop, la última versión de Android, sus creadores han decidido incluír una capa personalizada, bautizada como Nokia Z Launcher. Una de sus principales características es que va procesando los usos del dueño del aparato en base a horarios y lugares para crear menús dinámicos que faciliten el acceso a las aplicación dependiendo del momento del día. Este software puede descargarse también para otros teléfonos en Google Play.