«La enseñanza de materias de economía digital debería estar al nivel de los idiomas»

«La Universidad te tiene que enseñar a emprender», sostiene Miralles. «Aquellos que no tengan un producto innovador o disruptivo no seguirán adelante», advierte haciendo referencia a una especie de selección natural dentro del sector tecnológico. Todos estos temas se tratarán a partir de mañana en la Foro Internacional de Contenidos Digital, que vuelve a celebrarse tras dos años en blanco. El director de Red.es, organizador de esta feria, destaca que además de las ponencias que vertebran este Congreso se han añadido otros ejes al evento en el que se analizarán aspectos tan importantes como la financiación o el talento, un bloque temático muy focalizado a los estudiantes de secundaria, una etapa clave a la hora de decidir el futuro profesional. «Queremos llevar a muchos adolescentes y que vean toda la oferta educativa más vinculada al mundo digital», comenta este respecto.

«Personalmente creo que la enseñanza de materias de economía digital debería estar al nivel de los idiomas», responde al preguntarle por la conveniencia de añadir asignaturas como programación en edad escolar, como se viene haciendo desde hace unos años en países como Finlandia y que comunidades como Navarra y Madrid han empezado a implementar este curso. Defiende la necesidad de «poner en valor a los ingenieros, a los matemáticos y a los físicos que muchas veces no tienen ese reconocimiento social» y de transmitir a los jóvenes la idea de la necesidad de estos perfiles más técnicos para crear «equipos multidisciplinares».

TIC en las PYMES y comercio electrónico

Desde que Miralles llegase a la dirección de Red.es en 2013 uno de sus principales objetivos era impulsar la transformación digital de PYMES en España, muchas de ellas con tan solo tres o cuatro empleados. «El tamaño de las empresas en nuestro país es más pequeño que en el entorno europeo y eso dificulta la adopción de estas tecnologías», analiza en referencia a la hora de crear un canal de venta digital. «La falta de tiempo y personas puede hacer que un proyecto así puede parecer para una microempresa un mundo, cuando en realidad no lo es gracias a soluciones en la nube».

Sobre el comercio electrónico español, admite que su despegue si se ha visto en parte resentido por la crisis pero advierte de que hay otros factores como «la usabilidad» de las plataformas que acaban haciendo que ciertos colectivos que no cuentan con las mejores condiciones acaben optado por una alternativa tradicional. «En la parte del cliente, vemos el tema de facilitar datos personales todavía sigue siendo un freno al sector (que según sus últimos datos, maneja una facturación cercana a los 14.000 millones de euros)», remacha.

Unas reticencias que a muchos les suenan raras teniendo en cuenta la alta penetración entre la población española de telefónos inteligentes, algo que Miralles achaca a una «política agresiva» por parte de los operadores. «Esto provocó que muchos ciudadanos diesen el salto a los teléfonos inteligentes, pero esto no quita para que el ciudadano tenga su renta media y sus miedos». «Hay que generar todavía una gran confianza digital para que la ciudadanía se anime a comprar en internet», concluye.