Los perretes hacen juego

"Si creamos un perro, tenemos que hacerlo bien", dijo a los suyos Todd Howard, director de 'Fallout 4'. Se trataba, pues, de diseñar un modelo realista que, además, se comportara como un animal real y asistiera al jugador de alguna manera. Albóndiga retomaba el papel de un pastor alemán que ya aparecía en 'Fallout 3' y que tenía, eso sí, un destino mucho más trágico. Para desarrollar este compañero de cuatro patas, se tomó como modelo a River, el perro de uno de los diseñadores del estudio, capturando sus movimientos y sonidos para incluirlos en su representación virtual.

Pese a todo, Albóndiga no resultaría creíble si no actuará como una mascota real. El perro caminará con tranquilidad cuando el entorno no sea peligroso, pero rastreará aquellos escenarios desconocidos para él. En este sentido, si advierte algún peligro se colocará en posición agresiva, gruñendo y ladrando, y atacará cuando lo vea necesario. Cabe preguntarse si podría echar al traste una situación en la que el sigilo sea fundamental, pero sería raro que Bethesda haya metido la pata aquí. De lo que no cabe duda es de que la presencia del perro va a aportar un toque original a la historia.

Otros títulos con can

'Fallout 4' no es el primer juego que incluye al fiel amigo del hombre como mascota del protagonista. De hecho, de un tiempo a esta parte, son varios los títulos que cuentan con perretes. 'Riley', presente en 'Call of Duty: Ghosts', fue uno de los que dio inicio a esta tendencia en el ocio electrónico. En términos de jugabilidad, gracias a 'Riley', el jugador pudo explorar algunas áreas sin ser detectado y acabar con enemigos de manera silenciosa, dejando una huella importante en el terreno de los videojuegos.

El soberbio 'Grand Theft Auto V' también contaba con mascota. 'Chop', un rottweiller, seguía a Franklin en sus aventuras junto a los otros dos protagonistas. El dueño podía entrenarlo, enseñarle trucos como dar la patita o llevar una pelota en la boca y, merced a una app para móviles, se podía hacer que buscara paquetes secretos y que fuera más efectivo en sus ataques durante las misiones del juego. Por poder se podía hasta personalizar el collar que lucía durante el juego. Chop además exploraba entornos sin ser identificado. Poca broma.

'D-Dog' fue el nombre escogido para el can que protagoniza 'Metal Gear Solid V: The Phantom Pain', la mascota de los Diamond Dogs, el grupo militar encabezado por Big Boss. Lo más llamativo de su inclusión en el título es que al principio de la aventura, el perro es sólo un cachorro y el jugador podrá ver cómo se desarrolla y es entrenado para luchar a lo largo de toda la historia. Este fiel compañero con un parche en el ojo, al igual que su jefe, será muy útil para identificar enemigos, objetos y objetivos y completar, así, las misiones con éxito.

Un perro también protagoniza el juego ganador de los PlayStation Awards. 'Dogchild', fruto del esfuerzo del estudio madrileño Animatoon Studio, llegará en exclusiva a PlayStation 4 en diciembre de este mismo año. En este título el jugador podrá manejar tanto a Tarpak como a su mascota, Tarao. Se trata de un juego de acción carente de violencia en el que una pelota es la única arma con la que cuentan ambos.

Pero hay muchos más títulos con mascota. Con 'Nintendogs', la compañía creó un título en el que el usuario debía cuidar de su mascota virtual. La saga 'Fable', por ejemplo, introdujo en su segunda y tercera entregas un perro. 'Parappa the Rapper', en cambio, optó por ceder todo el protagonismo a este can rapero mientras que Walt, de 'The Valiant Hearts', sería uno de los últimos ejemplos. No cabe duda, los perros se están haciendo los amos del videojuego.