Madrid Games Week se hace grande

La decisión permitirá incorporar a los contenidos clásicos del evento una zona dedicada a los deportes electrónicos, los llamados e-Sports que cada vez tienen más importancia en el sector, y una 'smartzone' dedicada al software de entretenimiento para móviles y tabletas, que "ya representa el 75% de las aplicaciones descargadas" en los dispositivos móviles, tal y como ha explicado Sanz de Andino. Continuarán, claro está, la zona de expositores destacados -en 2014 fueron 90 y más de 240 juegos, una cifra que la feria espera superar este año- con la presencia, a buen seguro, de actores tan importantes como Sony, Nintendo y Microsoft, así como la Gamelab Academy, un espacio que se nutre de conferencias, mesas redondas y workshops, un área dedicada al retro y otra, a la robótica.

La eleccion de la fecha, segun ha explicado el director general de la Asociación Española de Videojuegos (Aevi), José María Moreno, tampoco ha sido una casualidad: "Es interesante poder mostrar novedades mucho antes de la campaña de Navidad y antes que en otras ferias europeas". A este respecto, el responsable de la parte de desarrolladores, Gonzo Suárez, ha explicado que al Madrid Games Week "le viene muy bien entrar en el rosario de internacional de eventos porque si no, no crece".

Pero, ¿cuál es el proposito de la feria? Evidentemente, hay un espacio que apuesta por servir de escaparate a las compañías, para que el consumidor pueda probar las novedades que las compañías tienen preparadas de cara a la campaña navideña y al próximo año. Pero también se trata, como reflexionaba Suárez, de "desarrollar el discurso" de una industria que a pesar de ser la primera industria cultural y de ocio del país no acaba de llegar a los medios de comunicación con la misma fuerza que el cine y la música.

En este punto juega un papel importante Gamelab Academy, un espacio que apuesta por "convertir a una parte de los jugadores que se acerquen a la feria en creadores", ha afirmado Iván Lobo, máximo responsable de Gamelab. En este sentido, Lobo ha explicado que España "es uno de los países más valorados en talento. La idea es convertir esa promesa en una potencia real". Así, más allá de conferencias y mesas redondas y como ocurría el pasado año, pequeñas empresas, desarrolladores 'indies' y estudiantes pondrán a disposición de los jugadores sus proyectos, "algo que se valora mucho ya que aprecian mucho el 'feedback'.

Súarez también ha hecho hincapié en la importancia de trazar ya qué papel quiere tener España en la industria, si el de mero consumidor -la cadena de establecimientos Game sigue colaborando con el evento y será la que vnda las entradas- o el de productor de juegos. En su opinión ferias tan "heterogéneas" como el Madrid Games Week pueden decantar la balanza hacia la segunda opción. Así las cosas, la intención, según ha señalado Moreno, es que la feria crezca de tal forma que se convierta "en un referente a nivel internacional a la hora de presentar novedades", ha dicho el director de Aevi, si bien no han podido detallar nada al respecto, pues el E3, la cita más importante del mundo, está a la vuelta de la esquina.

Finalmente, Sanz de Andino ha señalado que en esta edición intentarán que haya más puestos para jugar -las colas que se formaron el año pasado dieron pie a muchas quejas por parte de los visitantes- y ofrecerán "más contenidos" para que aquel que no pueda jugar pueda hacer otras cosas.