Programar 'apps', una forma de acercar la ciencia a los más pequeños

En el segundo proyecto más interesante fue Apps for Good, una inicativa que actualmente se lleva a cabo en 213 escuelas del Reino Unido y de Irlanda, los alumnos aprenden a programar aplicaciones para móviles y tabletas que ayuden a resolver problemas reales en Secundaria con el objetivo de motivar a adolescentes y desarrollar su capacidad emprendedora. También se ha desarrollado al otro lado del canal de la Mancha, STEMnet, una plataforma que engloba a escuelas, docentes y profesionales en actividades de apoyo a la educación STEM: experiencias de aprendizaje motivadoras, exposición de modelos referenciales y aplicaciones reales.

El último de los proyectos mejor valorados, que comenzó en Canadá y luego se extendió a Estados Unidos, Reino Unido y Bulgaria, es una metodología de enseñanza de matemáticas para Primaria y ciclo inicial de Secundaria. Su procedimiento consigue el máximo rendimiento de todos los alumnos y de sus docentes como instructores de la materia. «Son iniciativas con resultados demostrados en el ámbito de la enseñanza de las ciencias en sentido amplio», explica Alejandro Díaz Garreta, director de Estrategia, Educación y Publicaciones de Fundación Telefónica. Con este desafío, añade, el reto es «sensibilizar sobre la importancia de aumentar las vocaciones tecnológicas y científicas y generar oportunidades para que puedan replicar aquellas iniciativas educativas que se han demostrado más novedosas y eficaces».

El objetivo es dar a conocer el Informe Top 100 Innovaciones Educativas a entidades privadas y públicas para que «puedan ser replicadas o adaptadas a la realidad de cada centro educativo».

Advertencia

Las profesiones STEM resultan clave para fomentar una economía competitiva que dé respuesta a los retos reales de la sociedad: basada en el conocimiento; respetuosa con el medio ambiente; y socialmente inclusiva. Sin embargo, cada año disminuye el número de jóvenes que optan por estos itinerarios formativos. La European Round Table (ERT) advierte que la baja natalidad y el escaso número de estudiantes que eligen carreras STEM, suponen un desafío para la selección de recursos humanos en la mayoría de países europeos.

Los cambios previstos en la economía y en el mercado laboral en los próximos diez años afectarán a la demanda de profesionales STEM, que va a crecer en mayor medida que la de profesionales de otros sectores. Estos cambios tendrán influencia también en las habilidades requeridas en este ámbito, agudizándose en la próxima década la divergencia ya existente entre las habilidades requeridas a nivel profesional y aquellas con las que cuentan nuestros jóvenes.