Unicef urge aprobar la estrategia nacional para la protección de los menores migrantes

El autor del documento es Pablo Ceriani, especialista en Migraciones y miembro electo del Comité ONU de protección de los derechos de los trabajadores migratorios y sus familias. En la presentación del informe expresó que «el modelo de distribución de competencias es insuficiente». También quiso dejar claro que «el sistema de derivación a otras comunidades autónomas» no funciona correctamente , ya que de los más de 2.500 menores migrantes que se encuenran en estos momentos atendidos en Canarias «solo 132 han sido enviados a otras comunidades». De tal forma que los servicios asistenciales del archipiélago se encuentran desbordados.

Una prueba de ello es que mediante un decreto aprobado en 2020 se eliminó el límite de veinte menores por centro, llegándose incluso a duplicar ese número. Comentó Ceriani que «si no se hubiese establecido ese cambio legislativo se tendrían que haber abierto 150 nuevos centros». Otro gran problema, indicó el autor del informe, es la tardanza en la determinación de pruebas de edad. Dijo que más de un 85% de los menores no se encuentra «formalmente» tutelado por estar a expensas de la determinación de la edad por parte de las autoridades. Otro pilar que destacó Ceriani es la solicitud de asilo. Consideró que más de 300 menores estarían en condiciones de obtenerla, mientras que actualmente solo existen 45 solicitudes.

También preocupa el salto a la mayoría de edad, ya que en ese momento dejan de estar tutelados. Según el autor del informe, en España solo un 4% de los jóvenes de entre 18 y 24 años está independizado. Es por ello que Pablo Ceriani considera riesgoso abandonar a estos menores a su suerte. Un ejemplo de éxito es Rulo, un joven que hasta hace poco estaba tutelado y que acaba de alcanzar la mayoría de edad. Gracias al apoyo institucional ha conseguido un contrato de trabajo en una cocina y puede vivir de forma independiente.

Para realizar el estudio, explicó Rosa Gloria Suárez, presidenta de Unicef Comité Canarias, que «se han visitado 27 centros, de los cuales 18 son de protección de infancia, también hemos entrevistado a un alto número de personas que trabajan con niños migrantes a todos los niveles de la administración, así como a decenas de niños». Es por ello que han conseguido un gran cantidad de testimonios. Destaca especialmente el caso que recuerda Sara Collantes, especialista en Migraciones de Unicef España. Comentó que en un centro se conocía a un niño entre el resto de menores como «aquel que iba a llorar tras la cabaña número cuatro».

Esto se debe, según aseguró Collantes, a que muchos niños muy pequeños se ven obligados a convivir por falta de recursos asistenciales con muchachos más mayores y no se sienten cómodos. Esta especialista en migraciones también remarcó que «por nuestra posición geográfica nuestro país es el lugar de entrada de niños migrantes a Europa». También consideró fundamental que se reforme el reglamento de extranjería, favoreciendo un sistema rápido que permita autodocumentarse al inmigrante. Algo así como una declaración responsable.

En relación al género de los menores migrantes, a pesar de que mayoritariamente suelen ser chicos, comentan desde Unicef que en lo últimos tiempos se está observando un aumento de niñas. En Ceuta se han atendido a 1128 menores migrantes en los últimos dos meses, de los cuales ochenta son chicas. Estas se suelen enviar a centros de acogida más pequeños, con una atención más individualizada.

El presidente de Unicef España, Gustavo Suárez Pertierra, también ha asistido al acto de presentación del informe. Celebró que en la Conferencia Sectorial de Infancia y Adolescencia que se celebrará en septiembre se haya presentado el borrador de la estrategia integral para la Atención a Niños y Adolescentes Migrantes no Acompañados . También insistió en que «el foco migratorio se ha trasladado de Andalucía hacia Canarias y Ceuta», así como que «no se trata de un fenómeno pasajero, sino estructural que precisa herramientas adicionales para dar respuesta».