Trasladan a la prisión de Segovia al asesino confeso del crimen de Mocejón

El traslado del asesino confeso de Mateo ha sido una decisión de Instituciones Penitenciarias después de que el presunto autor del crimen estuviera en una celda colectiva en la enfermería del centro penitenciario. Ahí llego tras ser detenido por la Guardia Civil y permaneció sin saber quién era y dónde estaba.

Según la información de ABC, el asesino confeso tiene diagnosticada una discapacidad psíquica, concretamente un «retraso mental moderado» congénito y «trastorno del desarrollo por autismo». Así se recoge en el auto de prisión que dictó el responsable del Juzgado de Instrucción número 3 de Toledo. En la misma resolución, el juez Javier García López sostiene que hubo un «mínimo plan preconcebido» por parte de Juan para presuntamente asesinar de 12 puñaladas al niño de 11 años.

No es el primer recluso de estas características que ingresa en el centro penitenciario de Segovia durante los últimos años. En noviembre de 2021, el asesino de un niño de 9 años en la localidad riojana de Lardero ingresó en la cárcel de Segovia tras ser detenido por la Policía Nacional.

En aquel momento se justificó el traslado atendiendo a razones de seguridad debido a la escalada de tensión que desencadenó el trágico suceso. Instituciones Penitenciarias ordenó el traslado para poner kilómetros de por medio con el fin de prevenir conflictos en la prisión logroñesa y salvaguardar la integridad del preso ante posibles ataques por parte de otros reclusos.

Pero además, la cárcel segoviana también es mediática por haber sido el centro de internamiento de presos muy conocidos en España. El primero que inauguró el desfile de personalidades fue el exsecretario de Estado, Rafael Vera. Condenado a siete años por malversación de dinero público, ingresó el 16 de febrero de 2005 por el caso de los fondos reservados. Año y medio después logró el tercer grado por motivos de salud. Vera coincidió con el que fuera director de la Policía, José María Rodríguez Colorado. Durante su estancia, el exsecretario de Estado recibió la visita de Felipe González y de los antiguos ministros socialistas del Interior, José Barrionuevo y José Luis Corcuera.

El dirigente de Nuevas Generaciones del Partido Popular, Ángel Carromero, ha sido otro de los huéspedes de Perogordo. Llegó a finales de diciembre de 2012 para cumplir con cuatro años de prisión por el accidente de tráfico en el que murieron los opositores castristas y en dos semanas se le concedió el régimen abierto.

Dos años más tarde, el que ingresó en Perogordo fue el exministro de José María Aznar y expresidente de Baleares, Jaume Matas, que cumplió en Segovia la condena de nueve meses de prisión por un delito de tráfico de influencias.