Seis detenidos en Salt por los disturbios en protesta por el desahucio de un imán

El desahucio del imán de Salt (Girona) está en el origen de la tensión que se vive en la ciudad gerundense, que ha registrado esta pasada madrugada la segunda noche de disturbios y enfrentamientos entre encapuchados y los Mossos. Las algaradas han tenido un balance esta pasada noche de seis detenidos y un agente de la Policía catalana herido por el impacto de una pedrada.

Todo empezó el viernes pasado con el desalojo de una vivienda, donde vivían uno de los imanes de la ciudad y su familia. Hacía meses que el líder religioso no pagaba el alquiler, a pesar de que en el Ayuntamiento aseguran que no se encuentra en una situación de vulnerabilidad económica para poder acogerse a una vivienda social. El lunes pasado, el imán, junto con otras personas, intentó ocupar el inmueble del que había sido desalojado. No pudo, porque saltó la alarma y los Mossos llegaron a tiempo para impedir la ocupación. A la salida, un centenar de personas se concentró para protestar contra la actuación policial. Increparon a la policía y se dirigieron a la comisaría a lanzar piedras y huevos. Los disturbios se han repetido esta pasada noche: un centenera de encapuchados han lanzado piedras, cristales y pirotecnia contra los agentes de los Mossos, que han respondido con cargas.

Los manifestantes protestaban por los problemas relacionados con la vivienda que a su juicio vive el colectivo de inmigrantes. Denunciaron una persecución del Ayuntamiento, los Mossos y los jueces. El sindicato de la vivienda de la localidad ha emitido este miércoles un comunicado para exigir soluciones inmediatas en la «emergencia habitacional» y que se ponga fin a la «violencia policial». Según este colectivo, las noches de disturbios «han comenzado ante la violencia policial que se ha ejercido sobre dos ciudadanos que han acabado en el hospital». «Denunciamos la vulneración del derecho a la vivienda y el racismo institucional que se está produciendo en el municipio», ha señalado este sindicato. Según su versión, el imán, de 70 años, fue golpeado y tuvo que ser trasladado al hospital.

Salt, gobernada por Esquerra Republicana, tiene una población de 34.000 personas, de las que un 37% son de origen migrante. La muerte de un joven marroquí, tras huir de la policía, provocó graves incidentes en la ciudad en 2011, con la quema de coches y contenedores que algunos compararon con la situación vivida en los suburbios de París en 2005.

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